En la sociedad moderna sí existen héroes de carne y hueso que acuden a extinguir incendios, atender emergencias con sustancias peligrosas, inundaciones y cortos circuitos. Nos referimos a los bomberos.

Como cada año este 22 de agosto se reconoce su persistente labor pues pese a las limitaciones de equipo y nulo pago (la mayoría son voluntarios) salvan vidas humanas y animales.

En el Día del Bombero suelen develarse placas, monumentos y se entregan reconocimientos a estas personas que arriesgan su vida al tiempo que políticos y funcionarios se toman la foto con ellos, para que un poco de su heroísmo se les pegue instantáneamente.

Pero esta fotografía tomada en la Plaza de Armas de Culiacán, Sinaloa nos parece francamente indignante: un monumento a escala.

Foto: @difuminador