Reef Carneson, es un niño de ocho años de edad diagnosticado con leucemia linfoblástica aguda que deseaba acudir a uno de los conciertos del cantante  Pharrell Williams.

Por lo que el cantante hizo realidad el sueño del niño que lleva entrando y saliendo del hospital desde que tenía 12 meses de vida, Reef dijo ser un fiel seguidor del artista y soñaba con conocerlo algún día.

Así que en cuanto el rapero se enteró de su sueño lo invitó de inmediato a disfrutar de uno de sus conciertos. Pero fue más allá y contrató un coche privado para trasladarlo de Cincinnati a Filadelfia, ya que su frágil sistema inmune le impide hacer viajes en avión.