Tara Hudson, de 26 años, condenada a 12 semanas en prisión a causa de una pelea de bar, se encuentra en un reclusorio varonil cumpliendo su pena, aún cuando ha pasado todo su vida como mujer.

Sin embargo, hasta el momento, 100 mil personas han firmado una petición en línea para pedir que Tara sea transferida a una cárcel de mujeres, pues afirman, la prisión de Bristol, Inglaterra, es sumamente violenta, por lo que temen que la chica está en "grave peligro de abuso, violencia sexual e incluso de muerte".

Los solicitantes no están alejados de la realidad, ya que esta población es segregada y acosada por su orientación sexual. No obstante, Tara aún no obtiene el reconocimiento oficial de su reasignación genital.

Una portavoz de la cárcel dijo que el lugar en que se encarcela a las personas se determina "en función de su género legalmente reconocido", algo totalmente genitalista. Aunque aseguró que hay reglas estrictas para garantizar la seguridad de los presos transexuales.

En el texto se lee que hay entre 20 y 30 transexuales en las cárceles británicas que corren serios riesgos de sufrir abusos.

En mayo de este año, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) expresó su preocupación ante los repetidos actos de violencia y discriminación que enfrentan las personas LGBT privadas de libertad e hizo un llamado a los Estados Miembros de la OEA para que adopten medidas urgentes y eficaces que garanticen la vida, seguridad, integridad personal y dignidad de la comunidad gay en prisión.

Con información de Ari Vera Morales, presidenta de ?Almas Cautivas? y El Diario.mx