Siendo consciente que Leo Messi se encuentra en plena lucha individual con el madridista Cristiano Ronaldo, Neymar dejó que fuera Messi quien empujara el balón en el minuto 80.
El argentino ya había marcado antes el tercero del FC Barcelona en el minuto 46, nada más reanudarse el partido e igualó a Cristiano Ronaldo como máximo goleador de Primera División con 39 tantos. Gracias a Neymar, Messi pudo situarse momentáneamente al frente de la tabla con un gol más. A la que pudo, Messi devolvió al gesto al brasileño y cedió a este la potestad de lanzar el penalti que supuso el 0-7.
Un hecho que contrasta con una jugada que vimos en la jornada anterior en el Real Madrid-Almería. En aquel encuentro Arbeloa no cedió el balón al luso y marcó el gol, lo que enfadó al actual Balón de Oro, que ni tan solo celebró el tanto del equipo.