El taekwondoín tongano Pita Taufatofua sorprendió al mundo al volver a desfilar con un atuendo tradicional de su país, conocido como ta’ovala, esta vez a una temperatura de -5 y sensación térmica de -10 grados centígrados, durante la inauguración de los Juegos Olímpicos de Invierno de Pyeongchang.

El atleta, de 1.91 metros de altura y un peso de 100 kilogramos, ya había cobrado notoriedad en 2016 al lucir su ta’ovala en la inauguración de los Olímpicos de Verano de Río de Janeiro, cuando también se volvió viral por su musculatura. En aquella ocasión, fue eliminado en su primer combate por un marcador de dieciséis a uno.

Sin embargo, esto no le impidió continuar con su sueño olímpico. En diciembre de 2016, anunció a través de sus redes sociales que entrenaría para lograr un boleto a la justa surcoreana en la disciplina de esquí de fondo, hazaña que consiguió en su última oportunidad, haciendo historia para su país al convertirse en el primer deportista que compite en olímpicos de invierno y verano.

Con información de AFP y AP