Pfizer dice que tiene un 95% de efectividad, Moderna dice que tiene un 95% de efectividad, la Sputnik V rusa tiene un 92% de eficacia. ¿Cuál se aplicaría usted?
Las vacunas están saliendo al mercado en tiempo récord. Por lo general, cualquier nuevo medicamento toma años de investigación y desarrollo. La urgencia y las pérdidas económicas generadas por la pandemia han movido a los laboratorios a desarrollar con gran rapidez fórmulas para poder detener el letal virus que ha detenido a la humanidad y que en este momento está convirtiendo a la pandemia en un pandemonio.
¿Qué significan los resultados de efectividad en las vacunas?
Los laboratorios desarrollan una fórmula que con los conocimientos que cada uno tiene sobre el desarrollo de la enfermedad debería de generar una respuesta con anticuerpos para detener el virus y de alguna manera hacer inmune a la persona cuando se le aplique.
En este momento hay 155 ensayos preclínicos; 22 ensayos en Fase 1 o pequeña escala;15 ensayos en Fase 2 o con una mayor escala;10 ensayos en Fase 3 donde hay pruebas de eficacia mayores y en grupos más grandes que en las anteriores etapas.
La eficacia de las vacunas de Pfizer, Moderna y la rusa Sputnik no es la esperada por los expertos en vacunas, sobre todo con tan poco tiempo de desarrollo de estas.
¿Qué tan cerca estamos de la vacuna?
Después de probar que las vacunas son completamente seguras y que evitan que las personas se enfermen o de cierta manera reduce el número de víctimas mortales estas pasan a los reguladores de cada país para que puedan ser aprobadas.
En la gran mayoría de los países, estas aprobaciones se harán durante las épocas decembrinas o a principios del próximo año. Lo más seguro es que muchos de estos entes reguladores autoricen a varias de estas vacunas para uso de emergencia mucho antes.
La distribución será algo interesante pues seguramente empezará en los países donde se desarrolló la vacuna y después se empezará a distribuirse globalmente.
La COFEPRIS tiene que ser más rápida que nunca…
La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios no es la comisión de salud más veloz por definición. Para la autorización del uso de la vacuna contra el COVID-19 tendrá que ir contra su naturaleza y apurar todos los trámites necesarios para que esté disponible en el país.
Que la COFEPRIS tome su tiempo en la aprobación de ciertos medicamentos tiene algo de razón porque al aprobar un medicamento son en parte responsables del funcionamiento de este. En otras ocasiones no debería de tomarse tanto tiempo pues estos medicamentos ya están aprobados en otros países para usos específicos.
Un ejemplo muy cercano es el de un medicamento que le aplican a un familiar y la aprobación que este tiene para tratar cierto tipo de enfermedad. La aplicación de este medicamento si está aprobado por la COFEPRIS para la enfermedad diagnosticada en mi familiar por la vía intravenosa, pero no lo está cuando se aplica de manera subcutánea. En Estados Unidos, la FDA tiene mucho tiempo que autorizó la aplicación de este medicamento en inyección para la enfermedad de mi familiar, en México todavía no. ¿Cuál es el problema principal? Que las compañías aseguradoras y la seguridad social no puede aplicar el medicamento inyectado y tiene que ser mediante una infusión que toma más tiempo y pone en riesgo hospitalario a la persona que se la aplican. Y esto lleva más de un año. En el momento que la COFEPRIS diga, si aprobamos el uso de este medicamento inyectado las compañías aseguradoras podrán aceptar su prescripción y los seguros sociales podrán aplicarlo sin tener que hacer que el paciente espere que haya espacio en sus cuartos de infusión.
Esperemos que no pase lo mismo con las vacunas contra el COVID-19.
La vacuna y la economía
Los Bolsas de Valores en el mundo mostraron su optimismo por los resultados clínicos de las vacunas contra el COVID-19 y se movieron favorablemente. Igual el peso mexicano se apreció contra el dólar y en lo que va del mes se ha apreciado cerca de un 4.5 por ciento en combinación de la debilidad del dólar y del triunfo del demócrata Joe Biden.
Los retos de la vacuna
La distribución de una vacuna que tiene que estar en temperaturas de ultracongelación no es sencilla la de Pfizer necesita estar a -75 C y la de Moderna a -20 Después de salir de esas temperaturas la de Pfizer puede estar 5 días en un refrigerador a temperatura normal y un mes la de Moderna. En los países con menos infraestructura será más complicado que la vacuna llegue a todos.
El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud en México, Hugo López Gatell considera que la red de ultracongelación con la que contamos en nuestro país es obsoleta y tiene un deterioro de 30 años. Pfizer está considerando movilizar la vacuna en cajas de ultracongelación. En México, López Gatell advierte que, aunque se está trabajando en tener equipos de ultracongelación no se puede tener eso de un día para otro.
El canciller Marcelo Ebrard dijo que se tiene un convenio con Pfizer para poder tener esta vacuna con las temperaturas necesarias en los puntos de distribución necesarios en México. Ebrard también confirmó que se tienen tres contratos de compra con los laboratorios AstraZeneca, CanSino Biologics y Pfizer, además de las que se adquirirán por medio del mecanismo COVAX. Con estos acuerdos se piensa que se llegaría hasta 116 millones de mexicanos con posibilidad de vacunarse en territorio nacional.
También habría que esperar quienes serían los candidatos a ponerse la vacuna cuando llegue a México. ¿Empezaría con los mayores de 65? ¿Con los que representan la población en riesgo? ¿O con los que le pongan más ceros al cheque?
- En Reino Unido van primero las personas de la tercera edad, en Francia van las personas con trabajo consideradas con riesgo de contagio como choferes o vendedores además del personal médico. ¿Cómo estarán las prioridades para la vacunación en México? Ese va a ser otro tema polémico que no falta mucho para que se asome en nuestro país. Ojalá las decisiones que se tomen sean las más justas para todos y que los encargados de administrar el orden de aplicación de estas vacunas tengan la inteligencia necesaria para lograr el objetivo de detener la pandemia.