En los últimos años el concepto de software libre lo encontramos presente en conferencias magistrales y conversaciones informales de estudiantes y estudiosos de la informática y la ingeniería, sin embargo, el uso y abuso que se hace de dicho concepto ha ocasionado la vulgarización del mismo, como frecuentemente sucede con muchos otros términos que por su empleo excesivo, no se comprende a plenitud de lo que se está hablando, y genera consecuencias desastrosas. 

            Antes de comenzar, es pertinente hacer una diferenciación brevemente entre el software libre y el software gratis (freeware), debido a que el vocablo ingles 'free' posee dos acepciones: 'libre' y 'gratis'; luego entonces, puede existir confusión para quienes por primera vez tengan un acercamiento con el sistema operativo de código abierto. El freeware es un sistema operativo que puede distribuirse de manera gratuita (como prueba), incluso con su código fuente, aunque ésto sólo sucede de manera marginal ya que generalmente no se entrega la fuente. El objetivo del freeware es que el usuario conozca los beneficios que le ofrece el sistema y si le agradan decida adquirir el producto mediante una compra, no así con el software libre de código abierto, el cual generalmente no es acreedor de costo alguno, aunque puede tenerlo pero no es muy usual, únicamente con usuarios potenciales de la informática. 

            Es conveniente que hagamos una retrospectiva de la génesis del software mismo, debido a que la naturaleza de éste, es precisamente 'ser libre' a pesar de que algunos profesionales de la informática irresponsablemente afirmen lo contrario. Para ello, es preciso situarnos en la década de los 50 y 60, y señalar la trascendencia que tiene IBM, el gigante azul, durante este proceso de transición del software libre al software propietario o privativo. 

            Durante los primeros años de la informática el software era libre en todos los sentidos, es decir, sin trabas legales, económicas, técnicas o de cualquier otro tipo. Evidentemente el software no poseía el adjetivo de 'free', porque precisamente el open source software (sistema operativo de fuente abierta), era parte esencial e integral del software. El término 'open source software', fue ampliamente difundido décadas posteriores por Eric Raymond, ícono de la cultura hacker. Continuando con la retrospectiva, hubiera sido una redundancia llamar libre a algo que per se  lo era. 

            No obstante que IBM era el principal productor y distribuidor de hardware (ordenadores), el comprador (usuario) al adquirir su computadora se hacía acreedor al catalogo de acceso del código fuente de su hardware, era prácticamente impensable que el software se ofertara por separado en cualquiera de los ordenadores en venta. Esta situación se mantuvo durante toda la década de los 50 y 60. El software y su código fuente se vendían sin restricción alguna, pero es a partir de 1970, cuando IBM anuncia a sus clientes que ofertaría el software por separado, de tal suerte que si alguien deseaba adquirir un ordenador tendría que pagar un costo adicional por el software. Seguramente esta decisión estuvo motivada por el éxito que representó para los usuarios del software con código abierto, el estar intercambiando las mejoras del software y obtener por ello considerables remuneraciones. 

            Ahora bien, a partir de la década de los 70 se volvió sumamente habitual encontrarse con un software propietario, dicho de otra manera, con código fuente cerrado sin ninguna posibilidad de modificar o mejorar cualquier parte integrante del sistema operativo. De manera paralela a la existencia del software propietario surgieron algunas propuestas de lo que hoy conocemos como free software como Spice, TeX, y principalmente Unix. Cabe destacar que estos ensayos, por así decirlo, del software libre, eran empleados mayoritariamente en universidades, teniendo fines netamente académicos aunque de manera marginal se utilizaron dichos softwares en algunas agencias del gobierno norteamericano, por lo tanto, su uso fue postergado. 

            Si bien, las propuestas de Spice, TeX y Unix eran serias como software con código abierto, no podemos considerar las citadas iniciativas como software libre, particularmente por el hecho de que su producción, distribución y consumo eran demasiado limitadas. Es importante destacar que fue hasta el año de 1980 cuando el software libre apareció de manera consciente en el mundo de la informática. El padre del free software fue Richard Stallman, quien poco tiempo después creó la Free Software Foundation (FSF), cuya principal finalidad de la fundación era obtener fondos para proteger el desarrollo y distribución del software. 

            Vale la pena resaltar algunos aspectos biográficos de Richard Stallman, experimentado hacker a quien le enfadaba sobremanera el hecho de tener que firmar contratos de exclusividad que hacían que sus ideas desarrolladas, su trabajo intelectual, le fuera ajeno. De esta manera Stallman, inició el proyecto GNU (GNU's Not Unix), obteniendo importantes resultados de manera relativamente rápida. No obstante, la esencial preocupación del padre del software libre era que el usuario del sistema operativo permaneciera conforme con el rendimiento de su software, dicho cometido sólo sería posible si el usuario contara con la open source. El destacado hacker, además de crear la FSF, estableció los fundamentos éticos, lógicos, filosóficos y políticos de la importancia de mantener un software con la posibilidad de modificar o enmendar los errores que pudieran estar presentes en un sistema operativo determinado. 

            Asimismo, inspirado en la cultura hacker que establece que el software es conocimiento, y por lo tanto, es una obligación difundirlo sin ningún tipo de restricción, Stallman se dio a la tarea de emprender un sistema operativo que seguramente en las siguientes décadas se observará la importancia de la propuesta del hacker neoyorkino. De igual manera, redactó las bases políticas y filosóficas del free software, documentos como The GNU Manifesto (donde establece la necesidad de un software libre de restricciones), y el Why Software Should Not Have Owners. Sin duda, documentos redactados con una fuerte dosis de pensamiento marxista. 

            Así pues, se hace imprescindible aludir a los principios y características esenciales del free software. En primer lugar,  la libertad para ejecutar el programa en cualquier sitio, con cualquier propósito y de manera permanente; por otro lado, garantías para estudiarlo y adaptarlo a las necesidades que el usuario crea pertinentes, esto exige los conocimientos necesarios para acceder al código fuente; en tercer lugar,  posibilidad de redistribución, de modo que se nos permita socializar el producto con amigos, vecinos y familiares; y finalmente, libertad para mejorar el programa y publicar las mejoras, lo cual también implica poseer las habilidades pertinentes para manejar el código fuente. 

            Ahora bien, es importante mencionar los beneficios que conlleva emplear este tipo de software, es decir, el software con open source, principalmente porque el soporte, la calidad y actualización del sistema operativo con código abierto es frecuentemente posible obtenerse en foros de usuarios y desarrolladores que constantemente están dispuestos al enriquecimiento técnico, social e intelectual del free software. Una ventajas más es que, por lo regular, la distribución se realiza vía Internet, mediante el uso de blogs, foros, redes sociales, etcétera. 

            En este mismo sentido, cuando un programa no opera de manera eficaz y eficiente, los desarrolladores que se encuentran en competencia dentro del mercado, por así decirlo, pueden retomar el proyecto y adherir mejoras que se traducen en un beneficio colectivo para el conjunto de usuarios de open source. De tal manera que, todas aquellas mejoras contribuyen al continuo perfeccionamiento del software, incluso, las ventajas para el desarrollador/productor de free software implican que aquél pueda entrar fácilmente en competencia y adquirir lo último en tecnología para beneficiarse él mismo y a la comunidad usuaria free software. 

            Sin embargo, ¿como se logra el enriquecimiento técnico del software libre? Sencillo, los mismos usuarios realizan un reporte de errores a los desarrolladores a través de Internet, llega a suceder en situaciones que el programador pasa desapercibidas, así las correcciones al código fuente son constantes. A pesar de todo, la desventaja que pudiera encontrarse en el software libre para el programador es que cuando un trabajo no es por encargo, difícilmente obtendrá remuneración alguna por su labor, por ello es necesario que los usuarios potenciales de informática consideren la utilidad del free software, no sólo desde el aspecto técnico, sino también desde la óptica de generación de empleos. Un usuario informático potencial es indudablemente la administración pública. 

            De manera que, el uso del free software por parte de la administración pública es sumamente trascendental para ésta misma y para beneficio de la ciudadanía en general. Para efectos prácticos, es importante comenzar a enumerar cada una de ellas: en primer lugar, las administraciones se ahorrarían una parte considerable de recursos por el pago de licencias de software propietario; en segundo lugar, el uso de software de código abierto puede significar empleos para y entre los habitantes que presenten avances en el desarrollo de software para la administración pública. Lo anterior implica que tal situación derive en diversos proveedores y no en uno sólo, evitando altos costos por adquisición y manejo de software. 

            En este mismo tenor, se hace resaltar la interoperatividad e intercambio de información que manejan las instituciones públicas autorizadas, además de que se fortalecen e innovan las técnicas para la implementación de un gobierno electrónico eficiente, evitando también los molestos trámites burocráticos y, asimismo, modernizando a las administraciones e instituciones públicas en general. Del mismo modo se garantiza, en alguna medida, la seguridad nacional en materia informática, debido a que las instituciones públicas utilizan frecuentemente software que secretamente transmiten información confidencial. No es de sorprender que la Embajada de los Estados Unidos en Perú reaccionará en contra de una iniciativa de ley presentada en el Congreso peruano para que los Poderes del país andino iniciarán la transición del software propietario al libre. 

            En resumidas cuentas, la única y esencial diferencia entre el software propietario y el software libre es un aspecto legal, el uso de la licencia para manejar el producto a plenitud por parte del usuario, y para que éste satisfaga sus necesidades mejorando, adhiriendo o sustrayendo lo que el usuario crea conveniente. Un software libre para una sociedad libre.