Abuso de sexismo, racismo y misoginia en las caricaturas

Muchos de nosotros crecimos con las caricaturas de la Warner Brothers donde la mayoría de los personajes tienen actitudes que en estos tiempos no serían bien vistas por los ojos críticos de la sociedad.

Tal vez en ese tiempo se abuso de la burla sexista, racista, misógina, que demeritaba a la mujer. Habría que recordar que la excusa que tenia el zorrillo de la televisión, era que su personalidad francesa lo hacia un Don Juan y sobre todo que creía que la gata que siempre quiso conquistar era una zorrillita. Si analizamos todas las caricaturas de esa época, nos encontraríamos con muchísimos estereotipos que ofenderían a mas de uno.

Seria meterme en muchos líos analizar la actitud de Pepe Le Pew y ponerle una etiqueta machista o misógina o de abusador. Siendo sincero, salía algún episodio de Pepe Le Pew en la TV le cambiaba de canal porque me aburría que el zorrillo siempre quería con la gatita y no le hacia caso, no era tan divertido y creo que a la mayoría de los niños les pasaba lo mismo.

En la lista de los que sí son misóginos tenemos a un montón y muchas veces porque así era lo que se veía en la TV. Recuerdo un programa “No Empujen” con el conductor argentino Raúl Astor, que hablaba sobre el “atractivo visual” al referirse a las mujeres del programa. Cosificación de la mujer, muy fina, pero aún así cosificación.

Con la misma formula, pero aumentada con esteroides salió Brozo donde el personaje abuso de manera verbal y física de las mujeres que formaron parte de su programa. Entiendo perfectamente que todo esto era parte de un guion y que seguramente las mujeres dieron su consentimiento para este tipo de actuaciones, pero lo que se proyectaba al espectador era algo en ocasiones burdo.

En Nuevo León, empezó la guerra de redes sociales donde el actor Marco Polo hace una parodia del candidato a gobernador Samuel García con su personaje del Senathor. Como toda parodia, el Senathor es una versión exagerada y ficticia del Senador por Nuevo León. Cuando la parodia del Senathor solo se trataba de él mismo tenia gracia y de cierta manera era publicidad para el mismo candidato. Todo iba muy bien hasta que a los creativos se les ocurrió incluir a una parodia de la candidata por Morena Clara Luz Flores. En fechas cercanas al Día Internacional de la Mujer se les ocurrió interpretar una parodia de Flores tachándola de hueca y totalmente dependiente de su marido, al que también parodiaron.

¿Hasta dónde llega la libre expresión?

El actor Marco Polo había llevado muy bien el personaje del Senathor, no había puesto ninguna característica de machismo en su personaje. Se podría decir que el Senathor era una especie de Chava Iglesias de la serie de Club de Cuervos, pero light y muy bien llevado. La pregunta hacia Marco Polo sería ¿Por qué después de llevar un desarrollo del personaje sin machismo, ni misoginia empezó a burlarse de la única candidata mujer de la contienda? El actor no había sacado antes un personaje parodiado de ninguna mujer en sus sketches, ninguno. No se metió con la esposa de Samuel García. ¿Cuál es la razón del ataque hacia Clara Luz?

Se habla de censura por parte de la candidata cuando demando al actor por lo que se hizo en el sketch donde se incluyo a la parodia de la candidata por Morena al gobierno por Nuevo León. Imaginemos que esta parodia no la hicieran en tiempos electorales. ¿Usted creería qué esta bien o qué esta fuera de lugar? ¿Hasta dónde llega la libre expresión?

De un lado tenemos a Clara Luz Flores diciendo que no busca censurar, sino evitar que se normalice la violencia contra las mujeres. Del otro lado tenemos al actor Marco Polo que dice que lo censuraron y lo intimidaron y no le permitieron la libre expresión.

¿Usted cree que lo que presentó el actor Marco Polo en redes es sátira política o es una burla hacia las mujeres?

En tiempos de Raúl Astor, de Pepe Le Pew y de otros, la violencia de genero, implícita o clara era normal y de cierta manera permitida. Ahora, no se le puede echar la culpa a los personajes que interpretan los actores y decir que solo es una interpretación. Víctor Trujillo y Marco Polo pueden ser caballeros perfectos, anti-machismo y anti-misoginia, pero sus personajes o sus guiones no lo son.

Seguramente, el actor Marco Polo hubiera podido hacer una verdadera parodia política de todos los candidatos a la gubernatura de Nuevo León sin que tuviera que incluirse la violencia política por la cual fue demandado. Ahora el comediante tendrá que replantear a sus personajes, si es que los vuelve a presentar. Si queremos ver comedia política, pero hay que tener mucho cuidado en no caer en violencia hacia las mujeres.

Lo que, si es que, ser actor no es excusa para ser machista o misógino. Esperemos sátira política que nos haga pensar y que sea mucho mas inteligente que la comedia de genero.