La situación de desabasto de las medicinas en el país ha sido motivo de discusión en diversos medios de comunicación. Las farmacéuticas tuvieron que cambiar sus métodos de fabricación para adecuarse a lo que solicitó el gobierno para cumplir con las especificaciones que impuso la COPEFRIS. Es donde está el balón para dar los siguientes pasos y que se normalice el abasto de medicamentos en el sector salud.

 

Sin red de seguridad

Como en un acto de circo donde los trapecistas se lanzan al vacío se cambiaron las características de los medicamentos y esto afectó el surtido de estos a los sistemas de salud.

Al parecer las farmacéuticas ya están o están próximas a tener la capacidad de surtir los medicamentos que tanto se buscan por los hospitales públicos. Debería de ser un trabajo en equipo de las farmacéuticas y de la COPEFRIS el poder ponerse de acuerdo para llenar los almacenes de los productos faltantes lo más pronto posible.

 

No es una compra normal

Las licitaciones de medicamentos y equipo médico son muy diferentes a las que se tienen regularmente en cualquier compañía de servicios. Por cuestiones de patente no todos los laboratorios fabrican las mismas medicinas para atender los mismos casos.

Entiendo la generalización en productos básicos como el algodón, las aspirinas o el ibuprofeno, pero no es lo mismo para medicamentos de alta especialidad. En cuestiones de cáncer hay muchos tipos y no todos se controlan o curan con el mismo tratamiento.

La Copefris debe estar trabajando en revisar cada medicamento y el convenio con cada laboratorio, en los casos de medicamentos de especialidad no se puede hacer negociaciones generales o concursos pues no todos los laboratorios los tienen.

Lo complicado de estos casos es que muchas de las compras se tendrían que hacer con el modelo anterior para no afectar a los pacientes que los utilizan. Complicada la labor del Sector Salud.

 

No busquemos ahorros donde no los hay

Tenemos la idea que existen medicamentos más baratos por la moda de las farmacias similares donde se ofrecen medicamentos a los cuales se les acabó la patente y pueden ser fabricados por cualquiera. La calidad o la veracidad de la fórmula dependen mucho del fabricante, pero sí, esos sí se pueden encontrar más baratos.

Buscar rebajas en el cuadro básico de medicinas podría encontrarse de una manera muy sencilla pero no de la manera que más convendría a los intereses de los usuarios de los sistemas de medicina federales y estatales. Hacer compras de un cuadro básico de medicinas para todos los hospitales está fuera de lugar, pues cada especialidad necesita diferentes insumos. No es lo mismo comprar material para canalizar en un hospital pediátrico que un ginecobstétrico o uno de cancerología.

 

Pónganse de acuerdo

Los involucrados en la compra de medicinas se tienen que poner de acuerdo ya. No hay tiempo de especulaciones o de negociaciones largas. Estamos hablando de la salud y de la vida de personas que necesitan los medicamentos.

Varios doctores investigadores del sector me han comentado a través del tiempo que la COPEFRIS no es la comisión más rápida para sacar permisos. Imagino que la COFEPRIS cuando entró el nuevo gobierno ha cambiado procedimientos para acelerar los procesos para autorizar la entrada de nuevos medicamentos y revisión de los existentes. Si no lo han hecho es momento de empezar a cambiar los procesos para que sean más precisos y más rápidos. Esperemos que si no lo han hecho estén en la transición para hacerlo porque es necesario para la salud de los habitantes del país, sean o no usuarios de los sistemas de salud públicos.