La Reforma educativa emprendida por el gobierno federal es un cambio de fondo que mucho se necesitaba. Sentar las bases para un servicio profesional docente de calidad y emprender un esfuerzo de evaluación acorde han sido logros importantes de la administración del Presidente Peña Nieto, que sin duda traerán muchos beneficios para nuestro país.

La oportunidad esbozada por el Secretario de Educación Aurelio Nuño para reformar los planes y programas de estudio vigentes para la educación básica, es también pertinente y requiere de aprovechar las mejores experiencias de México y el mundo.

En este contexto resulta muy relevante la realización, este jueves y viernes 5 y 6 de noviembre, de la Octava Conferencia Internacional sobre Enseñanza de la Ciencia en la educación básica que lleva como título ?La enseñanza eficaz de la ciencia: clave para transformar a la sociedad? que tendrá como sede el auditorio Alfonso Caso de nuestra Universidad Nacional.

La invitación al evento fue signada por el Ingeniero Jaime Lomelín y el Doctor Mario Molina, Premio Nobel de Química, ambos destacados y activos líderes de la asociación civil Innovación en la Enseñanza de la Ciencia (INNOVEC), institución que organiza este evento internacional.

Cabe destacar que la Conferencia reunirá por primera vez en México, al grupo de trabajo que generó el documento ?Principios y Grandes ideas de la educación en ciencias? y del cual fui invitado, hace ya algunos años, a formar parte. Entre otros estarán presentes el Doctor Pierre Lena de la Academia de Ciencias de Francia, Katherine Blanchard del Instituto Smithsonian de los Estados Unidos, el Doctor Rodolfo Dirzo de la Universidad de Stanford, así como los líderes de programas que utilizan el mismo enfoque vivencial e indagatorio en países como Francia, China, Australia y Colombia, entre muchos otros expertos nacionales e internacionales.

Los temas de la Conferencia son de la mayor importancia para el país. En un primer panel, con la presencia del propio Doctor Molina, la Maestra Sylvia Schmelkes del Valle presidenta del Instituto Nacional de Evaluación educativa y del Maestro Omar Garfias Reyes, Secretario Técnico de la cruzada nacional contra el hambre de la Sedesol, se analizará cómo la educación en ciencias basada en la indagación promueve la curiosidad y el interés de los estudiantes por aprender a lo largo de la vida y cómo ese aprendizaje vivencial resulta crucial para formar, a partir de la educación en ciencias, una ciudadanía proactiva, enterada, informada y habilitada para actuar eficazmente ante los problemas sociales, económicos y ambientales que nos aquejan. Se busca formar un ciudadano con capacidad de aprender, de aprovechar la información y las oportunidades de desarrollo que su contexto le brinda.

Para México, por ejemplo, resulta crucial el abatir y disminuir los efectos negativos derivados de malos hábitos alimenticios en la población y propiciar que los estudiantes comprendan desde muy temprana edad las implicaciones de una inadecuada nutrición en los altos índices de obesidad y diabetes. Ello implica que los estudiantes experimenten para analizar sus dietas, comprender cabalmente el papel que juegan los diferentes tipos de nutrientes y su influencia en la salud o enfermedad del individuo.

Gracias al impulso que ha dado la Secretaría de Educación Pública a este tipo de programas en México se cuenta ya con una importante red de profesores mexicanos que aplican metodologías vivenciales e indagatorias en sus salones de clase; anualmente más de doce mil profesores y medio millón de estudiantes de doce entidades federativas cuentan con apoyos importantes para proveer una formación docente de calidad y materiales que sirven para que los niños aprendan vivencialmente y tengan la oportunidad de desarrollar sus habilidades cognitivas y de colaboración. Estos esfuerzos han sido también respaldados por los Gobiernos de los Estados así como de diversas compañías y fundaciones privadas.

Tenemos dos Méxicos, el avanzado, que ofrece grandes oportunidades para los mexicanos bien preparados y el México de la pobreza, donde este tipo de educación puede ser un instrumento muy útil para salir del rezago propiciado por la desigualdad y los bajos niveles de bienestar.