En la Ciudad de México, los camiones del transporte público además de ser viejos, contaminantes e insuficientes ahora también resultan un peligro para los automovilistas y en su peor versión, una amenaza para el peatón. No es ninguna novedad que en la urbe mas grande de América Latina y una de las más grandes del mundo, uno de los principales desafíos del Gobernante en turno es la movilidad. En el sexenio de Andrés Manuel López Obrador se buscó una alterativa con la Línea 1 del Metrobús, la cual fue ampliada y “mejorada” en los dos siguientes sexenios con la creación de nuevas líneas, pero la zona poniente de la CDMX, quedó en el olvido y sin mejoras al respecto.

Al no haber manera de construir una Línea del Metro o Metrobús en la zona poniente por el gran número de barrancas como es el caso de Álvaro Obregón y Cuajimalpa, la única opción de los vecinos es utilizar el servicio del RTP y las famosas Rutas de microbuses. Con el paso del tiempo la calidad del servicio que brindaban las rutas de transporte público en esta zona ha ido decadencia, llegando a extremos inimaginables. Como muestra están los acontecimientos de ayer, en donde una persona de la tercera edad   fue arrollada por un camión acompañada de su nieto, el cual desgraciadamente perdió la vida a manos de la Ruta 5 en Camino Real a Toluca, esto por la incapacidad de los choferes, que en este caso iba a exceso de velocidad y no pudo frenar hasta provocar esta tragedia.

En Álvaro Obregón tenemos las Rutas 5, 57, 117 entre otras, que constantemente se ven involucrados en problemas de excesos de velocidad, sin luces, atropellos, manejar con aliento alcohólico, y porque no hasta carreritas entre otros camiones, estas rutas simplemente violan el Reglamento de Tránsito una y otra vez, aquí la pregunta es ¿qué hará el Jefe de Gobierno y la SEMOVI para darle solución?

Mancera debe comenzar, en calidad de urgente, a sancionar y suspender a los choferes ineficientes y prepotentes con el mismo vigor se aferró a la Línea 7 del Metrobús de Reforma. Por supuesto esto implicaría la enemistad con ciertos líderes de los monopolios de las rutas, lo cual afectaría directamente su candidatura en 2018.

Queda más que claro que regular, concientizar y sancionar a quienes conducen estas máquinas de la muerte no está, ni ha estado en la agenda de los últimos jefes de gobierno, pues los ciudadanos reciben un servicio deplorable que en algunas ocasiones han terminado en tragedias.

Dr. Miguel Ángel Mancera con el mismo rigor que aplica las foto multas, exigimos se aplique el Reglamento de Tránsito para obtener servicio digno en el transporte público.