Paul
El sábado pasado se presentó el ex Beatle Paul McCartney. Mas de 100,000 personas se reunieron en el Estadio Azteca para ver una vez mas a uno de los ex integrantes del cuarteto de Liverpool en lo que podría ser una de sus ultimas giras.
Paul McCartney, nacido en 1942, tiene ya 75 años y su música está mas vigente que nunca. Con una lista de canciones con más de 50 temas, hizo un recorrido musical desde la primera canción de los Beatles hasta su mas reciente álbum como solista. Este señor logró reunir a abuelos, padres e hijos para escuchar su música. Con un show sencillo, el espectáculo no fueron los bailarines, confeti u otras cosas como en muchos conciertos. El espectáculo del show fue la música, sus canciones y todos los que coreaban las que se sabían.
El Dr Narro y los artistas
Entre los asistentes al espectáculo estaba el doctor José Narro Robles, secretario de Salud. Cualquiera pensaría que un secretario del gobierno federal traería un equipo de seguridad muy vistoso y que nos daríamos cuenta que el secretario de Salud había llegado. No fue así. El Dr Narro llegó como cualquier hijo de vecino, caminando entre las personas y saludando a los que lo conocían , dispuesto a disfrutar del concierto. Seguramente traía seguridad, pero no era de las que notas a kilómetros de distancia.
En el mismo concierto había varios cantantes y artistas. Curioso ver que estos personajes traían seguridad de esa que sí se nota. Una artista que salió en una temporada de Club de Cuervos estaba con su “escolta” que llevaba de esos típicos chalecos tácticos. Como ella, pude ver a otros que también eran “protegidos” por su equipo de seguridad. En un lugar donde las personas vienen a ver a alguien que sí es una verdadera leyenda, como que esta fuera de lugar hace alarde de fama.
La F1
Las carreras de la F1 para los que les gusta el deporte de la velocidad son impresionantes. Ver coches que prácticamente vuelan por la pista y oír el rugir de los motores es un espectáculo increíble.
3 días de la fiesta de los autos, cientos de miles de asistentes hicieron que el Gran Premio de México fuera un éxito. En el día cumbre, todo fue parte de un reconocimiento a nuestras tradiciones y al espíritu resilente de nuestra nación. El carnaval de Día de Muertos mostró al mundo una de nuestras fiestas tradicionales. La mano levantada en señal de silencio como lo hacen los rescatistas enseñó la unión en la desgracia y cómo México sigue de pie y buscando recuperarse de la desgracia.
Grandes rebases, una buena carrera de Checo Pérez y la coronación como campeón de la temporada de Lewis Hamilton le pusieron la cereza en el pastel a este gran evento que no solo trató de autos sino de algo mas.
Margarita y sus firmas
La candidata independiente, que recientemente renunció al PAN, Margarita Zavala, acompañada de su familia, aprovechó el evento al que es reconocida aficionada desde hace tiempo para levantar firmas. Ya lleva 35 mil, seguida de Jaime “El Bronco” Rodríguez que tiene 20 mil. Les pusieron los del INE una tarea difícil de cumplir, 800 mil firmas, pero si se apuran podrán hacer la hazaña.
La F1 y Adam Smith… y el precio de equilibrio de las tortas
Adam Smith en su libro “La riqueza de las naciones” mencionó el concepto de la oferta y la demanda. Un modelo económico que fue popularizado por Alfred Marshall en el que los precios de los bienes suben o bajan según su demanda en el mercado.
Hace muchos años, en los juegos del Monterrey en el estadio Tecnológico había vendedores de tortas. Las tortas al principio del partido tenían un precio y al final del partido eran mucho mas baratas. El fenómeno se daba todos los juegos, lo que no pensé es que este mismo fenómeno se fuera dar en un evento de nivel mundial.
El viernes los precios de los artículos eran comparables con los que tienen en las otras carreras. Una gorra oficial puede costar desde 30 hasta 50 dólares americanos y más o menos eso costaban ese día. El sábado hubo mas gente y se formó la verdadera demanda. Unas gorras fueron mas demandadas, otras menos. El domingo antes de la carrera, que es cuando más gente va al evento, los precios eran más altos. Ese día todos se quieren uniformar de F1 por lo que parece que los vendedores oficiales vieron la oportunidad y los precios estaban en lo máximo establecido.
Acabando la carrera pasó el fenómeno de las tortas del estadio. Muchos artículos estaban al dos por uno y en la compra de la oferta se agregaba un regalo. Eso lo veo normal. Lo que me pareció anormal es que las gorras del campeón Hamilton y la gorra rosa del equipo de Checo Pérez estuvieran cotizándose a 5 mil pesos por gorra. ¿Habrá alguien que esté dispuesto a pagar esa cantidad de dinero por una simple gorra que en las paginas oficiales no cuesta mas de 40 dólares? Seguramente algunos incautos hicieron esa compra, solo para decir que la habían comprado en el evento. En tiempos de compras por internet y envíos a todo el mundo , parece increíble que se quieran aprovechar así de los asistentes a la carrera.
Eventos de nivel mundial en CDMX
Lo mejor de este fin de semana fue que México estuvo en el escaparate del mundo. Enrique de la Madrid, secretario de Turismo, y los hoteleros de la ciudad deben de haber estado muy contentos por la derrama económica que trajeron estos dos eventos.
Los prietitos en el arroz de Sabritas
La logística de la F1 muy buena. La de Paul McCartney, creo que es difícil hacer un evento en un estadio que tiene mas de 50 años. La entrada a la zona frente al escenario fue un suplicio y la salida complicada. Imaginé a una señora en silla de ruedas, que fue asistida muy amablemente por personal del evento, saliendo de la parte baja del estadio por unas escaleras dignas de ser parte de una pirámide prehispánica. Se hizo un cuello de botella bastante interesante.
En la F1, lo complicado fueron los alimentos y bebidas. Ya empezada la carrera era difícil conseguir en las gradas algo que no fuera cerveza. Eso es problemático en un ambiente que es familiar. Gran pérdida para los de Sabritas que su producto estuvo agotado casi al principio de la carrera principal.
Pequeños detalles que se pueden corregir para tener una mucho mejor experiencia. Esperemos que tomen en cuenta estas fallas para futuros eventos.