Soy mexicana, nací en Monterrey y vivo desde hace 30 años en Nueva Jersey, Estados Unidos. Trabajo con un médico y por esta razón tuve que inmunizarme contra el coronavirus.

Recibí mi primera dosis de la vacuna de los laboratorios Moderna el día 6 de enero a las 9 de la mañana. Durante el día no tuve ningún síntoma.

Esa noche, 12 horas después de la aplicación empezó un malestar generalizado de cansancio, no gran cosa. Pasé una noche fatal, no dormí. Tuve unos sudores terribles, me cambié la ropa dos veces, el agotamiento era tanto que no pensé tomar mi temperatura.

A las 7 de la mañana del día siguiente sentí como si me hubieran dado un martillazo en el brazo izquierdo, cansada por no dormir, un tipo de congestión de pecho y nasal leve; ojos vidriosos (glassy eyes) y una apariencia (clammy) pegajosa, sudorosa.

Los síntomas no mejoraron durante la mañana, al contrario... Tenía una sensación de estar en una niebla mental, con dificultad para concentrarme y confusión. Dormí de las 2 hasta las 7 PM. No perdí el apetito, no tuve síntomas de diarrea ni dolores de cabeza.

En la noche desperté constantemente por el sudor y la incomodidad del brazo. En la mañana del segundo día el malestar generalizado continúa, lo podría describir como una vibración interna, siento mis órganos y cuerpo vibrar, muy extraño. Tengo todos los síntomas del día anterior pero con menos intensidad. Espero que mañana los síntomas disminuyan.