El mediocre arranque de la nueva etapa informativa de Televisa parece haber llegado a su fin: los mexicanos prefieren enterarse de la vida nacional con Denise Maerker, Carlos Loret de Mola y Karla Iberia. Son los periodistas favoritos de los mexicanos. Esto según datos de rating a los que he tenido acceso.
No es una obviedad: Televisa estaba cayendo. De hecho, TV Azteca peleó la supremacía informativa en el último trimestre del año pasado, y la aparición del nuevo canal de Imagen, con el excelente periodista Ciro Gómez Leyva como ancla noticiosa, amenazaron con quitarle la corona a la empresa de Emilio Azcárraga.
Sin embargo, las cifras de la audiencia nacional entre el 20 de enero y el 13 de febrero, hacen brincar de gusto a los televisos: el noticiero 10 en punto, estelarizado por Maerker, tuvo 10.24 puntos de rating, llegó a un millón 680 mil hogares y fue seguido, en directo, por 2 millones 176 mil personas. Javier Alatorre, con el noticiero estelar de TV Azteca, llegó diariamente, en promedio, a un millón 231 mil hogares. Es mucho, pero la ventaja de Maerker es enorme: 37 por ciento en rating de hogares.
Ciro Gómez Leyva, por su parte, llegó a 280 mil hogares mexicanos cada noche. Esta es una audiencia nada despreciable en vivo, sobre todo considerando la poca edad del canal. Pero está lejísimos de la reina Maerker.
Los datos de las audiencias para los noticieros vespertinos y nocturnos muestran una ventaja similar a la apuesta informativa de Azcárraga:
√ Entre 6 y 9 de la mañana, Televisa tiene 3.6 puntos de rating, llega a 591 mil hogares y a 675 mil personas. Su ventaja frente a Hechos es de 33 por ciento y frente a Imagen de 575 por ciento.
√ A las 2 de la tarde, Karla Iberia es la estrella. Su promedio de audiencia nacional registrado en este periodo alcanza 4.9 puntos de rating, llega a 808 mil hogares en promedio cada día y es vista por poco más de un millón de personas, en vivo.
El fenómeno más importante cubierto por los noticieros ha sido la llegada de Donald Trump a la presidencia de los Estados Unidos. Todos los informativos han puesto especial interés en ese tema, reportando el impacto de las órdenes ejecutivas de Trump, las negociaciones del gobierno mexicano, los análisis de los expertos en comercio y migración, las marchas y las historias individuales.
En ese tenor, Televisa apostó y ganó con un programa de análisis sobre la relación bilateral México- Estados Unidos. Lo hicieron el 26 de enero, tras la cancelación de la visita de Enrique Peña Nieto a la Casa Blanca y noquearon a las otras televisoras. Maerker, Loret de Mola y Joaquín López Dóriga condujeron “México en la encrucijada” con los sabios de la república Héctor Aguilar Camín, Enrique Krauze, Jorge Castañeda y Rubén Aguilar, y la participación telefónica de Vicente Fox, Felipe Calderón, líderes de partido y empresariotes. Un hitazo: duplicó el rating en hogares de TV Azteca y fue cuatro veces superior a Imagen. Eso sin considerar el eco del programa al día siguiente en medios impresos, radio y redes sociales.
Televisa, como otras grandes empresas de la comunicación, pasa tiempos difíciles, pero aún tiene potencia, periodistas, convocatoria e imaginación. Y Denise Maerker es, sin duda, la reina.