Las reuniones en esta época del año, en especial los días de navidad y año nuevo, serán un dolor de cabeza para las autoridades de salud y la de nosotros mismos. Empezando por resolver el dilema de si debemos viajar, visitar otras casas, o salir a algún restaurante, hotel, o lugares donde deseemos vivir estos momentos que con el paso de los años se han vuelto una tradición familiar.

¿Festejar o cuidarnos? ó ¿festejar con los cuidados necesarios? La decisión está en tus manos, haz lo que consideres correcto. Prohibido prohibir.

Es importante reconocer que una vez tomada la decisión que sea, no hay marcha atrás, debemos asumir las consecuencias de nuestros actos y ¿a qué me refiero con esto?, a que es exactamente un volado el saber si vamos a lograr evitar el contagio por coronavirus, ya que no debemos perder de vista que en los lugares donde más bajamos la guardia es en nuestras casas, con nuestra familia y con quienes más convivimos.

Las recomendaciones de salud para estas fechas, podemos darnos cuenta que poco han importado a algunas personas, porque ya tenemos un estilo de vida que hasta el momento parece imposible de modificar. Los abrazos, las expresiones de afecto, los saludos, han quedado muy arraigados en nuestra cultura occidental, así como los festejos por cualquier cosa que consideramos digno de compartir con los seres que amamos. Ejemplos de lo que estoy diciendo hay muchos a lo largo y ancho del país, y uno muy claro y muy difícil de controlar son las bodas, así como las reuniones caseras masivas, en donde podemos ver a las personas aglomeradas y sin ningún cuidado para evitar contagios.

Debemos asumir el compromiso con nosotros mismos y con nuestros familiares directos para tomar consciencia sobre los riesgos de contagio

Pero sobre todo tener claro que con la salud no se juega, en México, todas las clases sociales convivimos en los mismos círculos, en diferentes circunstancias pero convivimos, lo que quiere decir que nadie se salva de ser contagiado. Con la gran diferencia que los pobres no cuentan con los recursos suficientes para adquirir medicamentos que podrían salvarles la vida. No quiere decir que los de dinero no mueren por el covid, pero si es claro que tienen más acceso al cuidado de la salud con mejores resultados de superar la enfermedad.

Hay que cumplir con las medidas que desde un inicio de la pandemia nos ha estado indicando la Organización Mundial de Salud (OMS) 

Cómo usar cubrebocas, el lavado de manos frecuente, la sana distancia, evitar aglomeraciones y en la medida de lo posible quedarnos en casa. Es muy importante aislarte en caso de tener síntomas, hablar al 911 antes de acudir a una clínica para evitar riesgos innecesarios, llevar a una clínica de salud a las personas que tienen dificultad para respirar y así pueda ser atendida de manera adecuada en caso de estar contagiada y por último estar al pendiente de que se realicen las pruebas necesarias para confirmar que ya está libre del virus la persona que vivió el contagio.

No caer en los excesos de confianza porque el virus siempre está mutando, las vacunas estarán listas a principios de año, así que sigamos en alerta máxima.

Con cuidados saldremos avantes de esta crisis sanitaria, recuerda fortalecer tu sistema inmune y el de la gente que te rodea, come sano, lávate las manos siempre y sigue lo que te dicte tu corazón, que casi siempre es lo mejor. Te deseo muy felices fiestas y que nuestro compromiso por la salud sea uno de los objetivos de este fin de año. Si te cuidas tú, nos cuidamos todos. Abrazo virtual de navidad.