Según Carlos Loret de Mola, quien asegura apoyarse en fuentes oficiales, el actual gobierno de México ha intentado que un juez ordene aprehender al excanciller y extitular de Hacienda, Luis Videgaray.

Lo ha intentado, dice el periodista en su sitio Latinus, a través de la Fiscalía General de la República.

Pero, en un primer intento, afirma la nota reproducida por el diario El Universal, la FGR ha fracasado.

Es decir, el juez que ha visto el asunto rechazó otorgar la orden de aprehensión contra el brazo derecho del expresidente Enrique Peña Nieto.

¿Rechazó? En efecto, según Loret porque la denuncia carece “del sustento jurídico necesario”.

Se supone que eso le han dicho al columnista de El Universal fuentes del poder judicial y de la propia FGR.

Otras fuentes, de la Fiscalía General de la República, le han dicho a Carlos Loret que la Unidad Especializada en Delitos Electorales reformulará sus planteamientos para pedir de nuevo el arresto de Videgaray.

¿De qué se acusa a Videgaray? Según Loret, “de un delito electoral, dos delitos de cohecho, uno de asociación delictuosa y uno de traición a la patria”.

La traición a la patria tendría que ver con “haber impulsado de manera ilegal y por medio de sobornos de particulares la aprobación de reformas estructurales que ‘someterían la integridad de la nación a personas extranjeras’...”.

La acusación se refiere sobre todo a la reforma energética, “que permitía a extranjeros participar en la exploración y extracción de petróleo e hidrocarburos”.

El principal delito electoral, afirma Loret, consiste en que Videgaray, de acuerdo a lo confesado por Emilio Lozoya, entregó recursos “por un millón 664 mil dólares a Enrique Peña Nieto, durante su campaña por la presidencia de 2012, gestionados con la empresa Odebrecht y que provenían de sobornos en el extranjero”.

Hay otros delitos cometidos por Luis Videgaray, sostiene Carlos Loret, y parecen graves, como el de haber entregado “la cantidad de 121 millones 500 mil pesos a los legisladores Ernesto Javier Cordero Arroyo, Jorge Luis Lavalle, David Penchyna Grub, Ricardo Anaya Cortés, entre otros, a fin de que emitieran su voto a favor de la reforma constitucional en materia energética”.

Lo que no hay, o todavía no, es una orden de aprehensión contra Videgaray. ¿La habrá en el futuro inmediato?

No tengo ninguna razón para negar que sean de calidad las fuentes que dieron a Loret la información revelada por Loret en su Latinus y reproducida por El Universal.

Pero podría no ser así. Es decir, no estoy en condiciones de afirmar que sea estrictamente verdad todo lo comentado por el mencionado periodista.

El presidente López Obrador, en su mañanera de este martes, nos sacará de dudas. Su pecho no es bodega y, desde luego, lo que sepa lo dirá sin mayores especulaciones.

De ser cierto que se busca arrestar a Luis Videgaray, lo que necesariamente sigue es que la Fiscalía General de la República vaya por Enrique Peña Nieto. Por los mismos e inclusive por más presuntos delitos.

Ya se verá lo que pasa en el México nuevo en el que todo es posible, hasta el castigo a un expresidente, o a varios de ellos.

Felipe Calderón, Vicente Fox y Carlos Salinas deberán empezar a preocuparse. Pienso que Ernesto Zedillo no tanto: nunca me pareció un tipo mañoso, pero puedo estar equivocado.

En cualquier caso, la transformación prometida por el presidente AMLO avanza, y qué bueno.

Moraleja

  1. Para ser un periodista “perseguido”, según dice él mismo cuando se tira al piso, es bastante la información valiosa que le proporciona el aparato de poder político que se supone quiere destruirlo. 
  2. La verdad de las cosas, sólo le doy crédito a Loret de Mola porque otro medio “perseguido”, como el Reforma, también publicó en sus páginas este martes el presunto asedio contra Videgaray. Otro medio al que su gobierno “perseguidor” beneficia bastante con información privilegiada, por cierto.