Esos bobos de los bots

Curiosas las estadísticas de Twitter. Ayer todos sus usuarios parecían estar contra Claudia Sheinbaum. Confieso que me intrigó lo que pasaba en esa red social tan bobalicona —si se estira un poquito el significado de tal palabra puede ser un sinónimo de “bendita”.

¿Bobalicona? Es decir, “boba” —en el Diccionario de la lengua española si se busca “bobalicón” lo que aparece es el vocablo “bobo”.

Bobos, pazguatos o de plano muy ingenuos son los expertos en redes sociales que, con bots, pretenden manipular Twitter para dañar la imagen de alguien o algo.

A las siete de la tarde de ayer pregunté qué tan fuerte era el TT —#RenunciaSheinbaum— contra la jefa de gobierno de la Ciudad de México.

En 6 horas de actividad de esa campaña tuitera contra la señora Sheinbaum, numéricamente hablando esto es lo que había pasado:

√ 570 tuits

√ 320 retuits

√ Participaban 417 usuarios —reales o fabricados con tecnología—, que en teoría, pero muy en teoría podían llegar a unas 580 mil personas.

√ Todos los 10 usuarios que más mencionaban el hashtag se comportaban como bots.

√ El hashtag enfatizaba el asesinato de la niña Fátima y los otros feminicidios recientes en la CDMX.

√ Los mensajes que en general difundían los bots eran: (i) la supuesta ineptitud de Claudia en el tema de seguridad, (ii) la falta de atención a temas de seguridad de la 4T en general y (iii) que gobernar no es tomarse fotos limpiando el metro.

¿Bots tapatíos?

Lo más interesante de tal análisis tuitero era lo siguiente:

√ El 25% de los 570 tuits y 320 retuits se generó en Jalisco.

√ El 17% de los 570 tuits y 320 retuits se generó en la Ciudad de México.

Raro que un tema capitalino impactara más en Jalisco que en la CDMX. ¿Quién movilizo bots en ese estado contra Claudia Sheinbaum? ¿Para qué? ¿Estorba la jefa de gobierno a algún tapatío?

Sabrá dios, diría Álvaro Carrillo. Y es que los misterios de la politiquería en realidad uno no sabe nunca nada.