Con el triunfo de Mexico ante la poderosa Alemania y después del tercer debate entre los candidatos a la presidencia de la República podríamos interpretar ya el corolario de las campañas políticas que disputan el poder entre dos grupos: los llamados la “Mafia del Poder” y los que se ubican en el grupo de los “poderes fácticos” y con ellos dos visiones distintas de país y la disputa por la riqueza nacional.
Más allá de hablar de los detalles intrínsecos del debate, que si José Antonio Meade no lució que, si Anaya nervioso salió a defenderse de las acusaciones de lavado de dinero que pesan sobre él, o si AMLO no sabe sumar y que ni siquiera se tomó la molestia de leer las propuestas de sus colaboradores, lo importante es saber quiénes están atrás de cada candidato, a qué grupos de interés representan y a qué intereses responden.
AMLO echará abajo las reformas y protegerá a sus aliados
En el debate, finalmente lo más rescatable, fuera de ambigüedades, fue el hecho de que AMLO fue muy contundente en que echará para atrás las reformas energética y educativa y en materia ambiental queda supeditada a su política energética basada en petróleo, lo que representa regresar el modelo económico y el diseño político al del “estatismo” y control monopólico de la producción y de partido único.
Después de analizar el Tercer Debate presidencial, la posición de AMLO pareciera estar secuestrada por los integrantes que él, en su momento cuando fue jefe de Gobierno y peleaba por el tema del “desafuero” los llamó “Poderes Fácticos”, quienes en su mayoría estaban o están muy cerca de Carlos Salinas de Gortari, “El Innombrable”.
Quienes en ese momento representaban a los “poderes fácticos” empresarios, líderes sindicales, gobiernos extranjeros y representantes políticos del PAN y del PRI, hoy aparecen en su círculo cercano y son parte del apoyo de su candidatura.
Empresarios, sindicalistas, salinistas
Entre los empresarios destacados de los poderes fácticos se puede mencionar a Ricardo Salinas Pliego, (amigo de Raúl Salinas de Gortari) propietario de TV Azteca y de negocios mineros en sociedad con mineras canadienses, de Banco Azteca, entre otros. De ahí la importancia, para los negocios de este personaje, de contar con el líder de los trabajadores mineros como lo es Napoleón Gómez Urrutia. A cerrar la pinza como en los viejos tiempos del corporativismo.
Otro de ellos, es Alfonso Romo, su enlace con los empresarios y encargado de elaborar el plan de Gobierno, junto con Esteban Moctezuma, el ex director de la Fundación Azteca de la familia Salinas Pliego. Romo es un empresario polémico muy cercano a la familia Salinas de Gortari con quienes desde su juventud comparte su afición por el deporte ecuestre, y por ello defiende su amistad al asegura que es un mito que Carlos Salinas sea de la mafia del poder (http://www.eluniversal.com.mx/articulo/nacion/politica/2017/02/27/alfonso-romo-amlo-no-es-tan-horroroso-es-honesto). Participó con grupos empresariales que detestaba AMLO, como Monsanto, Casa de Bolsa Pulsar, Seminis, Cigarrera La Moderna y la aseguradora Comercial América y curiosamente se acerca a AMLO a través de uno de los supuestos apoyos de Ricardo Anaya, el dueño del partido Movimiento Ciudadano, Dante Delgado, quien es otro integrante del salinismo.
Otros mencionados por AMLO pertenecientes a los Poderes Fácticos y de manera destacada mencionamos a la profesora Elba Esther Gordillo, la ex lideresa del SNTE, quien fue puesta ahí por Carlos Salinas de Gortari, cuando el ex presidente volvió a reunir los liderazgos sindicales para que fuesen afines a él y apoyaran su modelo empresarial y de gobierno, en el sector educativo quitó a Carlos Jongitud Barrios y puso a la profesora Gordillo; en PEMEX quitó a Joaquín Hernández Galicia, La Quina, para dejar a Carlos Romero Deschamps.
De entre los políticos que fueron denunciados en su momento por AMLO como parte de los poderes fácticos, destacan entre otros, Manuel Espino, ex presidente del PAN y orquestador de la campaña “AMLO es un peligro para México”. Este personaje con su grupo Ruta 5, donde participa Rosario Robles, apoya además de AMLO campañas como las de Patricia Durán y Ruth Olvera, la primara hermana del cacique naucalpense José Luis Durán del grupo de Diego Fernández de Cevallos y Santiago Creel y la segunda panista prima hermana del alcalde de Naucalpan con licencia Édgar Olvera, que se convirtió en operador de Morena en la elección para gobernador del estado de México de 2017.
La lista es mucho más amplia y abarca personajes como Alfonso Durazo, quien fue secretario particular de Vicente Fox, Manuel Bartlett, ex secretario de Gobernación y responsable de la caída del sistema en la elección de 1988 y quien además fue secretario de Educación con Salinas, teniendo el encargo de darle fuerza a la profesora Gordillo y a la CNTE.
Los intereses tras la oposición a la Reforma energética
De todo esto, en el tercer debate surgió otro nombre de los que está en las tinieblas de los poderes fácticos, Javier Jiménez Espriú, el principal oponente del proyecto del Nuevo Aeropuerto y quien lleva la propuesta en el campo aéreo militar de Santa Lucía.
Este personaje, conocedor del sector energético en 1990 fue designado por Carlos Salinas de Gortari Subdirector Comercial de Pemex, con la responsabilidad, entre otras, de las ventas de los productos de la paraestatal, la introducción de nuevas gasolinas sin plomo, así como el desmantelamiento de la refinería de Azcapotzalco y contingencias como la lamentable explosión del drenaje en Guadalajara y la “reorganización” de la empresa en 4 subsidiarias. En ese encargo fue el representante de PEMEX en el Consejo de Administración de la empresa petrolera española REPSOL.
Es por ello por lo que no resultó tan casual o ingenua la publicación de Proceso donde destaca, que Jiménez Espriú es tío político del embajador de México en Estados Unidos, Gerónimo Gutiérrez, cuyo padre, Guillermo Gutiérrez Salinas, era accionista y presidente del Consejo de Administración de Grupo Idesa, socio de la firma brasileña Braskem, el “brazo petroquímico” de Odebrecht. Proceso también confirma que otro de sus hijos, Patricio Gutiérrez Fernández, fue mencionado en particular en las esquelas publicadas bajo las firmas de Braskem y Braskem Idesa. El hermano del embajador en Washington fue nada menos que el director financiero del consorcio Braskem Idesa S.A.P.I, la alianza entre Braskem y Grupo Idesa, del que la familia Gutiérrez aparece como la principal propietaria con 26% de las acciones.
A la par, su hijo era Director de Planeación y Finanzas de otra paraestatal, Conasupo, donde tenía como jefe a Raúl Salinas de Gortari y compañeros en la comercialización como Juan Manuel Pasalagua, cuñado de Raúl Salinas, quien por cierto estuvo encarcelado por lavar dinero en favor de su cuñado. Este tema viene a colación, porque dentro de las propuestas de AMLO está la de regresar el tema de los precios de garantía, control de los productos de subsistencia como maíz, sorgo, frijol y leche y seguramente el tema de las despensas para los mítines y de otro favorecer a los grandes comercializadores de productos básicos, como los Hank (los hijos de Carlos Hank) y favorecer la compra de estos en el extranjero por los amigos de Raúl Salinas como los que intermediaron la compra de leche radioactiva proveniente de Irlanda, el frijol chino comprado en Los Angeles, California, que no servía ni para forraje o el maíz contaminado con alto contenido de aflatoxinas que ni el ganado adulto lo soportaba y todos ellos comprados por Conasupo a proveedores que tenían como representante en México a socios y compadres de Raúl Salinas de Gortari como Enrique Rivera.
Otra empresaria de gran calado que está ligada a los poderes fácticos internacionales y nacionales que AMLO denunciaba es la ex esposa de Tonny Garza, ex embajador de Estados Unidos en México, María Asunción Aramburuzabala, así como el hijo de Olegario Vázquez Raña, Olegario Vázquez Aldir que operan medios de comunicación, una importante red hospitalaria y grandes constructoras como Prodemex, donde ha trascendido, por indiscreciones en algunas borracheras triunfalistas de su Contralor que apoyan la campaña de AMLO a cambio de contratos y concesiones y que además ejercen presión a los trabajadores para que voten en favor de Morena.
Otros de los enemigos marcados como poderes fácticos que influyeron en México, según AMLO es el presidente de Estados Unidos. Sin embargo, resulta que la propuesta energética, medio ambiental y el encierro nacionalista empata hoy con Donald Trump, quien requiere de un aliado en México que sea sumiso a sus necesidades. Esta alianza se solidifica, toda vez que uno de los partidos que impulsa la candidatura de AMLO, el Partido del Trabajo que comanda Alberto Anaya, el amigo desde la juventud de Carlos y Raúl Salinas y un aliado del régimen norcoreano del cual se ha dicho por varios medios que recibe subsidios y ahora Donald Trump es ya su aliado.
A todo esto: ¿dónde está la izquierda y la lucha?