La definición simple del espionaje es la de “observar atenta y disimuladamente lo que dice o hace alguien por algún interés o al servicio de otra persona, para conseguir información secreta o para descubrir algo; especialmente observar de esa manera a un posible o real enemigo”. A lo cual yo le agregaría… O por el simple hecho de sentir placer inmiscuyéndose y conociendo la vida de quien nos rodea.

Espías casuales, y no tanto

Todos los seres humanos espiamos, principalmente a los que nos rodean, es parte de la competencia personal, inclusive empresarial, lo hacemos de manera casual cuando vamos por la calle y miramos a los que van alrededor nuestro buscando su belleza, observando sus bienes materiales, su manera de vestir o actuar para compararnos y auto calificarnos frente a ellos, si una mujer observa a otra en la calle se contrasta, si conducimos nuestro auto hacemos lo mismo con otros conductores mirando sus coches, en las oficinas se observan entre sí para calificarse y competir en conocimientos, actitudes, liderazgo y aptitudes, muchas parejas espían a sus novias o cónyuges siguiéndolas a hurtadillas, o tomando sus pertenencias personales como sus teléfonos celulares para tener información amateur sobre sus actividades amorosas o sexuales.

Espionaje y guerras

Durante las guerras que ha tenido el mundo, los espías encubiertos han sido claves en los conflictos ya que han llevado información a sus ejércitos o naciones para tomar decisiones que contrarresten los ataques o le den una sorpresa a sus oponentes que simplemente no se esperaban.

Uno de los mejores ejemplos de la sorpresa con base en la información recabada por los espías en las guerras se encuentra en el mito del caballo de Troya donde los griegos al brindar un “regalo” a los troyanos pudieron introducirse en la fortificada ciudad de Troya.

Durante la segunda guerra mundial gracias al trabajo de los espías rusos, ingleses, franceses y norteamericanos se pudo adelantar el bloque que combatió a la Alemania Nazi diseñando estrategias que llevaron a la derrota de Adolfo Hitler y su poderoso ejército.

.El mayor atentado perpetrado en los Estados Unidos que se llevó a cabo contra las torres gemelas de Nueva York el 11 de septiembre del 2001 tuvo detrás un sistemático trabajo de espionaje que dio por resultado la destrucción del World Trade  Center frente a los ojos de millones de espectadores que vimos cómo murieron cientos de personas.

Espionaje amateur

Las tecnologías van de la mano de quienes practican de manera profesional o amateur el espionaje, micrófonos y cámaras instalados en pequeños artículos como lentes, plumas, bolsas, relojes y hasta inocentes juguetes, pueden estar instalados en las casas u oficinas de cualquiera que tenga a su lado a alguien que quiera espiarlo u observar sus hábitos o conductas de vida.

Software malicioso, teléfonos celulares, drones, satélites y telecomunicaciones son hoy la manera en que los gobiernos o agencias particulares de espionaje conocen nuestras conductas, pensamientos, acciones y relaciones interpersonales que tiene en sí, un simple objetivo.

¿Qué busca el espionaje?

El espionaje tiene una razón simple aunque su logística parezca complicada y en resumen, el objetivo es debilitar al individuo base a la psicología recabada del mismo, un buen trabajo de espionaje y del espía, le puede otorgar la suficiente información para encontrar los puntos débiles, como infidelidades, deudas económicas, manías, miedos, fobias, problemas intrafamiliares y conductas inclusive delictivas que puedan ser usadas en su contra por quien quiera hacerlo.

En el caso del espionaje entre países o empresas, los puntos débiles se encuentran entre los empleados o ciudadanos a disgusto que pueden contribuir a derrotar al gobierno en turno o a revelar secretos o patentes para la competencia.

Espionaje de periodistas en México

El presunto espionaje realizado en México a diferentes periodistas famosos algunos e influyentes otros, tendría un objetivo simple y es el de encontrarles alguna triquiñuela que les de herramientas para hacerlo público y minar su credibilidad o extorsionarlos con esta información para manipularlos a su conveniencia.

Lo interesante del presunto espionaje realizado a mis compañeros y colegas será cuando alguno de ellos demuestre que la información recabada fue utilizada para coartarlos en su libertad de expresión o manipularlos con extorsiones, pero para esto se tendría que saber en que clase de triquiñuelas o actos inmorales están metidos.

Y todo esto tiene que ver con el poder que cuando se tiene, simplemente no se suelta tan fácil.