Irreverente

No le hace que sea el jefe administrativo de la clínica del ISSSTE de Piedras Negras, ni que tenga la edad requerida, ni que el director de ese lugar lo haya justificado.

El hecho es que el diputado plurinominal por Morena, Francisco Javier Cortés, se brincó la fila y fue vacunado contra Covid-19, enfrente de mucha gente que atestiguó el agandalle.

Le valió madres y lo grave del asunto se los platico en seguida. Arre!

Cobra vida en esto la milenaria frase de que “la esposa del César no sólo debe ser casta. También debe parecerlo”.

Para amolarla de acabar, ni siquiera hay certeza profunda de que la mentada vacuna que provoca tanta alharaca, sirva tanto como lo han cacareado los acólitos dentro y fuera de la 4T.

A ver, me dicen mis amigos de Piedras Negras que el tal diputado morenista se las da de muy chingón porque como trabaja en el sector salud oficial mexicano, presume influencias entre funcionarios del mismo gremio en Eagle Pass, al otro lado de la frontera.

Si así es, ¿por qué no “charoleó” con los oficiales migratorios del lado gringo en ese paso fronterizo y se fue a vacunar a los muchos centros de vacunación qué hay en la frontera y sin necesidad de hacer ni siquiera fila en la clínica del ISSSTE?

¿Saben por qué? Porque en México hay un republicano desmadre en eso de la aplicación de la vacuna, del manejo de la pandemia y muchos otros temas más.

Y porque aunque Donald Trump está a punto de dejar la presidencia, en Estados Unidos todavía nos dan muuuuchas lecciones en eso del orden y el respeto a las reglas y más a las instituciones.

De muy poco sirve que AMLO haya salido con su cantinela de siempre de que se va a investigar lo hecho por el legislador que “no tiene cara” porque se tapa la mitad con el logo de Morena.

Aquí está un chingazo más a la imagen del presidente y del partidazo, a menos de seis meses de las elecciones más voluminosas en la historia de México.

Ni AMLO ni sus “asesores” pueden con esta yuntada de bueyes que nunca van a padecer un aneurisma cerebral por stress ante la pandemia, porque son inmunes debido a que no tienen cerebro.

CAJON DE SASTRE

“Y en este y muchos casos, ¿de qué sirve la propaganda populista de la Cartilla Moral que presume desde el púlpito del Palacio Nacional, el huésped de la suite presidencial?”, se pregunta la irreverente de mi Kalifa. Y yo la secundo.