La columna “Templo Mayor” de Reforma incluye a Margarita-Ríos Farjat como posible jefa del SAT:
1. “En las últimas horas surgió otro nombre, el de la regiomontana Margarita Ríos-Farjat, abogada y maestra en derecho fiscal por la UANL.”
2. “...habría sido recomendada por el próximo jefe de la Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo.”
3. Las credenciales de Margarita “son tan buenas que muchos ya la ven en la recta final para hacerse de la poco agradable pero muuuy necesaria tarea de recaudar”.
A mí me agrada cómo escribe Margarita: pulcra, exacta. Su artículo de ayer publicado en Reforma, lo demuestra. Creo que ella haría un muy buen trabajo en el SAT. No sé si lo publicado por Alejandro Junco sea un chisme, un trascendido o sea verdad.
Lo que sí creo es que Margarita está sumamente calificada para el puesto. Hoy he platicado con ella. Su regia cortesía nunca la abandona. Convenimos en no darle vuelo a lo que aún no existe. Ella lo entendió, también Federico Arreola, con quien conversé ampliamente sobre la posibilidad de que Ríos-Farjat se hiciera cargo del SAT... desde Monterrey.
¿Por qué no?
Dudo bastante de que Poncho Romo, como especula Junco, haya “recomendado” a Margarita para el SAT. Margarita no requiere de “recomendaciones”. Lo que sí sé es que la descentralización va en serio. Si es Margarita u otra persona en el SAT, en este caso, ¿por qué no dirigir el sistema desde Monterrey?
Fuentes consultadas por SDPnoticias nos dicen que, al menos, hay 300 puntos desde donde se puede dirigir el sistema digitalizado. En efecto, el SAT está sumamente digitalizado, se puede manejar sin problemas desde esa ciudad. José Antonio Meade se lo puede corroborar a Andrés Manuel. Y lo que es importante es que la “recaudación” sea “sensible”, con criterios no sólo contables. Eso lo agradecerían los contribuyentes sometidos y los ciudadanos que ven trato preferencial para los grandes empresarios. En el léxico del nuevo régimen, de la Cuarta Transformación, la palabra “contribuyente” debe de redefinirse. Y Margarita, poeta, entiende de sensibilidad y de la dignidad que deben tener las palabras y los hechos.
¿Un SAT desde Monterrey e itinerante para resolver los problemas de los contribuyentes? ¿Por qué no? Existen personas comprometidas con el país, como Margarita, que muy bien podría dirigir el SAT desde Monterrey. Sus estudios sobre derecho fiscal la avalan ampliamente. Si la Secretaría de Economía despachará desde Monterrey, ¿por qué no la oficina del jefe del SAT? ¿Y por qué no alguien tan sensible, respetuosa de las relaciones humanas y de los derechos ciudadanos como Margarita Ríos-Farjat? Estamos en agosto, hay tiempo.