Estimado lector, ¿Ha usted tratado de ver algo a través del ojo de una cerradura? Si la respuesta es afirmativa, posiblemente la frustración, incomodidad y franco disgusto seguramente lo han hecho claudicar. “Así no se puede”, piensan algunos.

Esa forma de ver algo, limita de entrada nuestro campo visual y lo constriñe a la medida ideal para que pase una llave, es decir, la hendidura no está diseñada para ver, sino para abrir puertas.

En ese orden de ideas,  ¿Qué parte de la verdad nos dejan ver los actores involucrados y cuál no es conveniente mostrar al público en el caso del empresario Joaquín Vargas, dueño de MVS y su “revelación” a los medios acerca del chantaje (del que no es ajeno) del Gobierno Federal en el tema de la concesión de la banda ancha de 2.5 gigahertz (GHz)?

¿Dónde empieza la dimensión política del asunto y termina la económica, la periodística o la social? Es evidente que hay una sobredeterminación de factores que deben ser considerados en la lectura del asunto.

¿Es relevante la figura de Carlos Slim en el contexto del escándalo desatado por la declaración de Joaquín Vargas? Lorenzo Meyer piensa que sí:

“Si las frecuencias expropiadas finalmente se licitan y Televisa las llega a ganar, entonces el dominio de la megaempresa aumentará de manera escandalosa. Si Telcel, propiedad de Carlos Slim, también se beneficiara de la licitación, habría competencia pero a costa de afianzar aún más a los dos grupos económicos más fuertes de México, cuyo poder ya es un problema serio para la salud política y económica del país, y se acentuaría la naturaleza oligárquica del sistema”[i]

¿Cuál es el asunto de fondo entonces? Jorge Zepeda Patterson afirma[ii]:

“Esto no es un asunto de banda 2.5, sino es un asunto tres bandas, como en la carambola”, expresó el director general del sitio de noticias sinembargo.mx.

Con la determinación del gobierno de México, que encabeza el presidente Felipe Calderón, al final “se favorece a Televisa, el gran involucrado en la sombra en este caso”, dijo Patterson.

“Recordemos que originalmente el caso nace de una demanda de Cablevisión, filial de Televisa”, y que esa empresa “es el gran aspirante” a ocupar una porción de la banda de 2.5 GHz, expresó el columnista.

En segundo lugar, la maniobra “le hace el favor o la cortesía” a Enrique Peña Nieto, virtual presidente electo, porque hubiera tenido un alto costo político para él tomar una decisión de esa índole, dijo.

Otro motivo, mencionó Patterson, sería la intención del gobierno de “quitarse el agravio pendiente” por la pregunta que hizo Carmen Aristegui, como conductora del noticiario de MVS, respecto a Felipe Calderón.

Es innegable también que este caso muestra que a los mexicanos se nos administra la verdad,  se nos dosifica la esperanza y se indultan a las explicaciones en aras de mostrar una realidad muy distinta a la que se vive en las cabinas de radio y en los noticieros de la nación. No hay democracia posible con medios ad hoc al poder.

El ojo de la cerradura es, pues, hecho a medida y necesidades de quien administra y decide lo que los mexicanos ven y pueden conocer. 

Por eso, la aportación de Carmen Aristegui es invaluable, su noticiero es un espacio crítico donde la elite no tiene margen de maniobra y lo saben. Sin duda, es una forma diferente de ejercer el periodismo en México, cuando existen tantos texto-servidores ad hoc al poder en turno.

No puedo soslayar el papel del señor Presidente en este escenario, puesto que no ha estado a la altura de las circunstancias. Desde los incomprensibles comunicados de prensa de la oficina de la presidencia, llenos de adjetivos y que desde ahí demuestran un abuso de poder, hasta las descalificaciones que realizó a la figura del empresario Joaquín Vargas.

El Lic. Felipe Calderón es el presidente de México, no es un ciudadano cualquiera ¿cómo puede defenderse con equidad el dueño de MVS cuando el propio ejecutivo lo descalifica? Ese no es el papel de aquel que tiene a bien dirigir los destinos de la nación.

Para muchos mexicanos, las declaraciones del señor Presidente demuestran una profunda inmadurez, una demostración de intolerancia y sobre todo, un incomprensible propósito de magnificar un asunto de por sí complicado que atañe directamente a su persona. Ese es entonces el verdadero rostro de una persona que se empeña en subirse al ring a la menor provocación, olvidando la seriedad y el compromiso que conlleva la investidura presidencial.

¿Usted qué opina, estimado lector?

[i] http://noticias.terra.com.mx/mexico/lorenzo-meyer-quien-que-como-y-cuando,68ff09cd63359310VgnVCM20000099cceb0aRCRD.html

[ii] http://mexico.cnn.com/nacional/2012/08/22/la-decision-del-gobierno-respecto-a-mvs-un-manotazo-zepeda-patterson