El pasado 15 de julio llegó a su fin el plazo de registro para ser consejero electoral de alguna de las 18 entidades que tendrán elecciones en 2015. Tal y como lo anticipé en mi colaboración anterior los dos últimos días fueron los de mayor afluencia.
Si nos ponemos a revisar las cifras de candidatos o ciudadanos registrados por entidad, resulta de llamar la atención que mientras las leyes procuran una equidad de género en la realidad el interés por participar no es equitativo por parte de hombres y mujeres; en general el 35.13% son mujeres y 64.87% son hombres, casi el doble del sexo masculino, pero si nos ponemos a pensar matemáticamente en que en la designación se procurará que exista equidad, esto quiere decir que las mujeres registradas tienen el doble de posibilidades que los hombres. Curioso, ¿no?
También para analizar está el hecho de que Nuevo León sea el estado con mayor porcentaje de mujeres: 42.94%, mientras en Yucatán las damas sólo alcanzaron el 26.77% de participación. Respecto al número de registros por entidad todo parece ir de manera más o menos proporcional al número de habitantes de cada entidad, por ejemplo, en Baja California Sur sólo se registraron 94 prospectos, mientras que en el Distrito Federal y el Estado de México 329 y 389 respectivamente.
El análisis de las cifras de participación nos dan algunos otros datos, por mencionar algunos de ellos vemos que en Yucatán sólo 9 mujeres no pasarán a la siguiente etapa después del examen de conocimientos mientras que en el Estado de México 224 hombres quedarán fuera después de la misma etapa.
Respecto a quiénes se inscribieron hablaré en mi próxima colaboración, una vez ya confirmados algunos nombres, pero les adelanto que en algunas sedes algunos se llevaron la sorpresa de que les falto algún documento y como llegaron al cinco para la hora de cierre como el “ya no se preocupen, ya llegué para salvar la democracia”, pues no les dio tiempo de reponer su error.
Cabe destacar que los expedientes de cada uno de los 3461 candidatos todavía deberán de revisados, pues tal y como dijeron los consejeros del INE en la sesión de Consejo General en la que se aprobó el modelo de convocatoria, una cosa es que esté el documento y otra que esté correcto.
En ese sentido, hay un documento que llama mucho la atención, la constancia de residencia. De acuerdo a pláticas con varias personas de diferentes entidades al parecer un "pequeño" error fue muy común en este documento por parte de los municipios o delegaciones según sea el caso, alguien incluso sugirió que era un "error" no tan involuntario, y es que en casi todos los formatos de constancia de residencia viene la típica leyenda de que este documento es a petición del interesado y añaden: "para trámites ante el ..." y ahí está el detalle, muchos de estos documentos salieron con el nombre del instituto electoral de las diferentes entidades, cuando debiera de ser en todos los casos "para trámites ante el Instituto Nacional Electoral".
Seguramente muchos en este momento corrieron por su folder para revisar qué dice su constancia, si es que tuvieron la precaución de sacarle una fotocopia y alguno que otro ha de estar pensando no tiene sentido lo que estoy diciendo.
Comparto con usted amable lector mi punto de vista, en estricto sentido pudiera parecer una nimiedad, si la constancia de residencia dice que es para trámites ante el INE, IEPC, IEDF, IEEM o para el OPLE de la entidad que usted guste o mande, al final de cuentas cumple como documento mediante el cual la autoridad correspondiente da fe del tiempo de residencia en la entidad en la que cada quien vive, pero por otro lado y también con la misma objetividad, la leyenda antes citada es muy clara y acota el uso de dicho documento única y exclusivamente para trámites ante la autoridad ahí enunciada.
Independientemente de si jurídicamente es o no válida esta constancia para la convocatoria emitida por el INE, considero de una alta importancia que quien pretende ser parte del máximo órgano de dirección de una autoridad electoral no tenga la precaución y el cuidado de leer y revisar un documento que en este caso es por así decirlo, para el propio beneficio.
Se imaginan lo que podemos esperar si alguien así llega a ser designado como consejero electoral, le parecerá insignificante si algún documento multa, sanción o voto es para un partido y sale dirigido o se lo dan a otro, están o no de acuerdo en qué podría pasar.
Espero sus opiniones
@dgv1968