De forma trágica y dolorosa ayer domingo 10 de enero de este aún balbuceante 2016 dejó de existir de manera “material” el gran rock star inglés David Bowie. El Rock, la música popular contemporánea, el cine, el teatro, la televisión, ahora las redes sociales perdió a un personaje que siempre será un antes y un después.

Característica física fundamental de David Bowie eran sus ojos, tenía uno café y el otro azulado, entre gris y buenas noches. La razón es que cuando era joven tuvo un pleito escolar y le recetaron tal golpe que el ojo le cambió de color. No hay documentación si era bueno para el trompo o víctima del carrilla hoy tan mundialmente conocida como “bullying”.

Es precisamente en su juventud cuando se desprenden sus cualidades artísticas y comienza a hacer música, pero no desde las fórmulas comerciales, pero también sin renunciar a ellas. Esa sería y será por siempre la cualidad fundamental del británico. David Bowie fue, es y será un eslabón conocido y no perdido.

Sin David Bowie no se pudieran haber concretado bandas y artistas de la talla de Génesis, Peter Gabriel y Pink Floyd. Es el mítico “camaleón”, el “marciano gay” quién eleva a el rock y la música popular contemporánea a dimensiones verdaderamente ARTÍSTICAS y formas MULTIDISCIPLINARIAS. Bowie introduce el concepto del teatro y las artes escénicas al rock. Sería inmediatamente seguido por Génesis y Peter Gabriel, quienes también enriquecerían el género, sub género o etiqueta.

El asunto consistía en disfrazarse, en darle un sentido significativo de odisea y/u onomatopeya a la música consiguiendo un valor artístico de altísima calidad. Este experimento lo lleva a concretar discos totalmente CONCEPTUALES, que desde principio a fin tocaban historias y no se divagaba de canción a canción. Él es responsable de la mutación de Pink Floyd que en los años 60´s tocaban muy insípidamente y a finales de los 70´s incursionan en los discos conceptuales y el incluir la actuación en sus presentaciones en vivo. Ejemplos, el Dark Side of the Moon y The Wall.

Así es como el rock mutaría a su forma PROGRESIVA. Pero también es Bowie el que con su ejemplo y propuesta, provoca el nacimiento del subgénero “Glam”, sin David Bowie, no se pudiera entender y en una de esas no hubieran existido Kiss, los Twister Sister, Quiet Riot, Guns and Roses, Poison, Def Leppard, Motley Crue y un sin número de grupos Metal Rock extravagantes.

La percepción ultra dimensionada de Bowie y la multidisciplianariedad de su propuesta lo involucran en obras de teatro, la fotografía, el cine y hasta llegó a dar vida a un banco. David Bowie es el que eleva a un carácter artístico al rock, sin ser chocoso y sin negar “el plástico” o la música popular que por tantos años se denominó no artística o vacía. Bowie es escuchado tanto por eruditos, artistas, gente común o especializada y logra la conexión. El rompe la barrera y desvanece la línea entre lo vulgar y lo sofisticado. El replantea y modifica el término: creatividad.

Esto que parece tan simple hace que el rock y la música popular contemporánea alcancen la denominación y la valía de convertirse en patrimonio cultural de la humanidad.

Bowie inició el año vivo, tanto que lanzó un nuevo disco después de un regreso fenomenal en el año 2013. Ya no verá culminado otro más de sus éxitos, pero estaba seguro de que seguiría siendo eso.

Miles de artistas han sido y serán influenciados por Bowie, miles de artistas lo han covereado (hasta Nirvana), él es y será el vivo ejemplo de que la muerte no existe. Hasta pronto al hombre de los ojos bicolor. Levántate y anda…