Cuando escuchas la palabra AYOTZINAPA quizá lo único que se te viene a la mente son marchas, disturbios, MENTIRAS HISTORICAS, padres sufriendo, gritos y refriegas, lo que las noticias te cuentan, lo negativo, la injusticia… Dos años cumpliendo y nada parece resolverse. ¿Nuevos peritos, nuevas investigaciones…? ¡Por Dios!
Te contaré una historia personal, lo que para muchos otros significa esa palabra, lo que realmente encierra y es la base de las escuelas rurales…
Por el año de 1972 llega a un pueblo enclavado en la sierra queretana un maestro cualquiera, un maestro más, José Luis Sarabia Figueroa, atravesó medio país, desde la sierra de Chihuahua le dan cambio y llega hasta el estado de Querétaro, oriundo de Morelos nuestro protagonista comienza la nueva vida en lugar apacible, aparentemente; recién casado con hijo pequeño en brazos y esposa de la mano…
Este hombre en particular al paso del tiempo se fue ganando el respeto de los pobladores, gente huraña y de tradiciones cerradas, su amor por el deporte lo llevó a colaborar con los jóvenes del lugar llevando su labor docente más allá del aula, la convivencia con la población en general, la lucha diaria así como las penurias compartidas fueron haciendo de él uno más de los habitantes del lugar…
A pesar de estar tan cerca del centro del país, en esos años la provincia queretana con carreteras de terracería y poco tránsito vehicular era un calvario, transportarse a las cabeceras municipales o estatales no era tarea fácil, al pueblo solo los domingos entraba un autobús viejo de esos “trompudos” cualquiera que haya visto una película donde los niños corren detrás alborozados pegándose cual moscas sabrá a qué me refiero… Quizá hasta alguno de ustedes disfrutó de ese “pequeño placer”…
Con el paso de los años nuestro maestro se convirtió en el director de la escuela, para ese tiempo también tenía ya la fortuna de poseer un automóvil el cual vino a sumarse a las pocas camionetas que solo los ricos del pueblo presumían, con esto pasó a ser casi el taxi del lugar ya que no había enfermo o persona necesitada de salir que no suplicara por el favor, favor que nunca fue negado… así fuera de madrugada.
Al paso del tiempo se percató que la gente de la localidad se enfermaba continuamente del estómago, epidemia fuerte que no se podía erradicar, dándose a la tarea de averiguar qué era lo que realmente estaba ocurriendo y las causas reales…
En las afueras del pueblo años atrás se avecindó un hombre, el cual formó una granja, todo esto relativamente lejos de la población… este hombre casi no compartía con los pobladores, salvo los peones que tenía contratados… pero las personas de la localidad no sabían que esta granja porcina estaba contaminado el agua… la misma que la comunidad entera consumía… el agua llamada “potable” solo de nombre, se contenía en un registro en pleno arroyo… de ahí entubada llegaba a un depósito en el pueblo por inercia, de esta misma forma era repartida a los hogares.
Al percatarse del terrible problema fue metiéndose de lleno, hicieron estudios al agua, dándose cuenta que efectivamente estaba siendo contaminada por la granja porcícola que a unos cientos de metros volcaba los desechos de los animales e incluso bañaba a los mismos en pleno arroyo, de esta manera y al trasminarse el agua llegaba directo al depósito para la comunidad… confiados en que el agua era pura nadie la hervía y de clorarse ni hablar, en esos tiempos ni se usaba eso…
Esto desató una serie de eventos en el pueblo, gente a favor y en contra, lo peor vino cuando el verdadero dueño de la granja se entera de lo sucedido…UN DIPUTADO … sí, el dueño era un diputado del estado, la persecución en contra del profesor comenzó, al grado de balear su casa, recibir amenazas de todo tipo, tuvo que vivir un tiempo dentro de la escuela que al ser terreno federal le daba un poco más de protección… defenderse de todas las formas que conocía… las cosas no pararon… el mismo gobernador de ese entonces ya fastidiado de “los dolores de cabeza causados” Rafael Camacho Guzmán en persona, lo mandó a llamar… y con “buenos argumentos” lo convenció de cambiarse… sí, adivinan… “O te aclimatas o te aclimueres…”, elige…
El maestro tuvo que salir del pueblo sin avisos… hasta el día de hoy quizá muchos se van a enterar a grandes rasgos el porqué de su salida y no los tantos chismes que en ese entonces se manejaron… Pero lo más importante, LA SEMILLA SEMBRADA GERMINÓ… la gente abrió los ojos y siguió luchando hasta que la granja fue cerrada definitivamente, las personas cambiaron sus hábitos de consumo con el agua, sirvió de mucho el empeño que este maestro invirtió. La comunidad puso manos a la obra sobre los perjuicios que se estaban causando a un pueblo completo por el simple capricho de un político que sacaba provecho personal…
Por eso les digo Divagantes… AYOTZINAPA tiene significado diferente para cada uno de nosotros, tuve la fortuna de tener en mi infancia, a este condiscípulo de LUCIO CABAÑAS por que fueron compañeros de formación en esa misma NORMAL RURAL ISIDRO BURGOS… él también es orgullosamente “AYOTZINAPO” y en gran parte los valores de los que te van nutriendo, te van cimentando a lo largo de la enseñanza es la que te hace SER lo que eres, luchar por lo que crees y poner tu vida en aras de ello, sin importar que la misma vida vaya en juego, sin importar que tengas que cargar un arma en el cinto mientras das clases esperando que vengan a matarte… solo por defender la salud de un pueblo que ni siquiera es TU pueblo… ni dinero ni amenazas personales valieron…. Solo hasta que amenazaron a su familia completa tuvo que irse…
Sin embargo puedo decirles sin temor a equivocarme que no había persona en ese lugar que no tenga un buen recuerdo o le deba un favor a este maestro, muchos crecimos con sus enseñanzas y no solo de carácter docente, las personales eran mejores…
Cuando sabemos de estas historias, es cuando comprendemos el por qué las NORMALES RURALES de nuestro país hacen estorbo a quien pretende inocular LA NUEVA EDUCACIÓN EN MÉXICO…. Siempre dirán que son un cáncer y que están llenas de malvivientes y depredadores…
Pero historias como la mía se cuentan miles a lo largo del país… los maestros formados en escuelas rurales son los enviados a esos rincones inhóspitos de nuestro país, esos a donde los maestros de ciudad no quieren llegar… la forma de enseñar a un profesional cuenta mucho… las nuevas escuelas y no se diga las escuelas carísimas solo enseñan al INVIDIDUO a ver por sus intereses personales, capitalismo puro… se pueden dar cuenta como la ideología que se pretende implementar en nuestra sociedad va encaminada hacia ese fin… la familia y las tradiciones de un pueblo se dejan de largo, hay que tener cuidado…
¿Qué es lo que queremos para nuestras futuras generaciones?