“Que ante coberturas mediáticas poco exitosas, descenso de credibilidad y consecuente disminución de audiencias, MVS, de Joaquín Vargas, busca una alianza editorial con la agencia de noticias canadiense Thomson Reuters”. Así arranca, este viernes, la columna Trascendió de Milenio.

Supongo que es cierta la noticia (la alianza MVS-Reuters). Normalmente los editores de Milenio están bien informados y más o menos actúan con responsabilidad cuando dan a conocer hechos. Se trata de una información interesante que debe ser analizada en un contexto de movimientos empresariales mediáticos relacionados con apoyar la fuerza, poca o mucha, de empresas nacionales con el prestigio de influyentes grupos de comunicación del extranjero.

El Financiero, que fue rescatado de su bancarrota por uno de esos empresarios atrevidos y con recursos surgidos casi de la nada que de vez en vez se ponen en moda en México, se ha ligado a Bloomberg. Y, por su parte, Grupo Mac Multimedia, de los mexiquenses señores Maccise ha establecido un convenio editorial con El País, de España, diario que acaba de admitir en su consejo a otro empresario del Estado de México, Roberto Alcántara.

Ahora bien, que probablemente sea verdad que MVS busque pactar cualquier clase de convenio de colaboración con Reuters, no le quita al comentario de Milenio la mala leche. Porque cae en la categoría del pinchismo periodístico hablar, en el caso de MVS, de “coberturas mediáticas poco exitosas, descenso de credibilidad y consecuente disminución de audiencias”.

Se trata de pinchismo periodístico y, también, de falsedades. Veamos por qué.

MVS tiene uno de los principales programas noticiosos de radio en México, el de Carmen Aristegui. Hace no muchos días, SDPnoticias dio a conocer estadísticas nacionales que ubican a Carmen en tercer lugar nacional, solo detrás del líder, Ciro Gómez Leyva, y del que ahora está en segundo sitio, Óscar Mario Beteta.

Hay que destacar que Gómez Leyva y Beteta son poderosos, además de por la calidad periodística de lo que hacen, porque Radio Fórmula, la empresa para la que trabajan, cuenta con una mejor infraestructura radiofónica que MVS en todo México. Pero en el Distrito Federal la señora Aristegui supera fácilmente a Ciro y Óscar Mario.

Ahora bien, podrán tener más oyentes que Aristegui los señores Gómez Leyva y Beteta, pero ¿tienen más credibilidad? Conozco encuestas que ubican a Carmen como la periodista con mayor credibilidad en México. Gracias a muchos años de trabajo periodístico muy crítico Aristegui se ha ganado la confianza de la gente.

Pasemos al otro tema, el concierto de Texcoco.

Eruviel Ávila, gobernador del Estado de México, ha clausurado el reciento en el que la empresa Live Talent planeaba celebrar el Hell and Heaven Metal Fest en el que se ha anunciado participarán bandas famosas como Kiss y Guns N’Roses.

El asunto ha provocado un escándalo, sobre todo en Twitter. Cada quien da su versión de las razones que llevaron al gobernador Ávila a cancelar el concierto:

1.- El gobierno dice que son muy inseguras las instalaciones de Texcoco en que el concierto se iba, o se va a celebrar si hay un arreglo de última hora.

2.- Las personas con mayor interés por los espectáculos argumentan que el concierto se canceló por presiones de la empresa Ocesa que no quiere más competencia.

3.- Algunos comentaristas políticos, como Julio Hernández, de La Jornada, sostienen que se trata de una maniobra del gobierno priista del Edomex contra la presidenta municipal de Texcoco, Delfina Gómez Álvarez, que milita en Movimiento Ciudadano, el partido de izquierda presidido por Dante Delgado que tanto está creciendo mientras el PRD se destruye por las luchas internas y por al auge de Morena, de Andrés Manuel López Obrador.

¿Quién dice la verdad?

Al gobernador de Edomex no le resultará complicado probar que, en efecto, es inseguro el recinto de Texcoco. Así que debe hacerlo a la brevedad posible. Hasta donde estoy informado, el gobierno estatal no miente ya que estamos hablando de un lugar muy inadecuado para un espectáculo masivo como el programado.

Lo que es más difícil de probar es la participación de Ocesa en este lío. De hecho, nadie podrá hacerlo. Personalmente no creo que esa empresa recurra a semejantes vulgaridades para eliminar competidores. Pero, ni hablar, seguramente sin deberla ni temerla Ocesa saldrá maltratada en su imagen. Así son las cosas en nuestro país, en el que cualquiera puede hacer crecer una calumnia.

¿Que es una maniobra política contra la alcaldesa? No lo sé, pero sin duda los dirigentes de Movimiento Ciudadano aprovecharán el regalo para tener presencia en los medios, algo que le ha faltado a ese partido que, por lo demás, ha sido muy eficaz a la hora de ganar elecciones en no pocos lugares del país y que ya se prepara para quedarse con uno de los platillos fuertes del 2015, la alcaldía de Guadalajara que, muy probablemente, se llevará Enrique Álfaro.

Las personas que están molestas por la posible cancelación del evento deberían, en primer lugar, informarse, es decir, entender que a veces hay riesgos mayores en las grandes concentraciones. Y, por lo demás, tendrían que exigir a la empresa organizadora del concierto que saque la chequera y busque realizarlo en uno de los tantos estadios que hay cerca de la capital del país o en el mismo Distrito Federal y que están bien diseñados y construidos y con todo en orden para recibir a las masas.

Es una triste realidad que las empresas de espectáculos, para elevar sus ganancias, buscan los sitios más baratos, aunque no sean adecuados, como parece ser el caso. Y, aunque seguramente la alcaldesa de Texcoco no ha participado en nada indebido, esas empresas normalmente se salen con la suya porque cuentan con la complicidad de funcionarios públicos.