En el diario ABC de España han presentado fotos y descripciones de los 10 aeropuertos más raros del mundo. De esos, solo cinco me parecen verdaderamente dignos de comentario. Son los siguientes.
1.- El aeropuerto Princess Juliana de Sint Maarten, en el Caribe.
En este los aviones aterrizan a tan solo 25 metros de las cabezas de los turistas que disfrutan la playa. Según ABC, en esto “reside su atractivo. Y es que es, posiblemente, el único lugar del mundo donde se puede ver a los aviones (incluidos los de pasajeros de gran porte como el Boeing 747) cómo se aventuran o regresan de su destino justo debajo del mismo”. Eso sí, “el gobierno local advierte que acercarse demasiado ‘puede provocar lesiones serias o incluso la muerte’ al poder ser succionado por una turbina o ser enviado hacia el mar con gran fuerza”.
2.- El aeropuerto Juancho E. Yrausquin de Saba, también en el Caribe.
Se le considera “la pista comercialmente útil más corta del mundo, ya que apenas supera los 400 metros de longitud, cuando lo habitual es que sean de, al menos, 2.5 kilómetros”. Solo lo usan aviones pequeños y helicópteros.
3.- El aeropuerto de Gibraltar, que para el tráfico del peñón cuando avión aterriza.
“Y es que la carretera más transitada del peñón cruza transversalmente el aeropuerto, cuya construcción data de la II Guerra Mundial, por lo que debe cerrarse cada vez que pasa un avión”.
4.- El aeropuerto Funchal de Madeira, Portugal.
“De lejos, podría tratarse de una maqueta, y los pilares sobre los que se apoya, simples palillos”. En realidad, 180 pilares de concreto lo elevan a 70 metros del mar. Es tan complicado usarlo que los pilotos que lo usan necesitan una licencia especial.
5.- El aeropuerto de Courchevel en los Alpes franceses.
Su pista de aterrizaje tiene apenas 525 metros y una pendiente del 18.5%. Solo lo usan pilotos especializados, helicópteros privados y a veces James Bond en sus películas.