Rosa, una mujer residente de Nueva York, Estados Unidos, fue sorprendida por los vecinos del edificio en el que vivía luego de perder su casa debido a la pandemia y tener que dejar de asistir a hacerles la limpieza porque ya no podía pagar el alquiler. Un video compartido en Facebook ha tocado cientos de corazones.

Lo que pasó fue que como ya no era requerida, pues la mayoría de las personas permanecían en casa y hacían la limpieza por sí mismos, se quedó sin clientes y poco a poco sin la oportunidad de poder rentar. Así que sus vecinos recaudaron el dinero necesario para pagarle dos meses en el departamento más grande del edificio.

Vecinos consideran a Rosa como de la familia

La empleada conocía a todos los residentes y a algunos hasta los vio crecer, dado trabajó a su lado durante 20 años, así que es considerada parte de la familia para muchos. Pero sin dinero, se vio obligada a abandonar su hogar e irse a vivir con su hermana, sin avisarle a nadie.

"Realmente apreciamos lo que has hecho por nosotros. Es grande porque así de grande es nuestro amor por ti. Queremos agradecerte porque eres parte de nuestras familias"

Un vecino.

Sus vecinos dejaron de verla y al enterarse de lo que había pasado, decidieron poner manos a la obra y reunir el dinero necesario para que Rosa pudiera regresar a casa. Logrado esto, la hicieron llamar fingiendo que requerían que limpiara un departamento y la llevaron a visitarlo para que se familiarizara con él, puesto que sería su nuevo hogar. 

Empleada rompió en llanto por el detalle

Y no fue hasta que recorrió los cuatro dormitorios, tres baños, dos balcones y un roof garden, que le dieron la noticia: El inmueble era para ella y el alquiler correría por parte de la comunidad de vecinos. El video muestra a la empleada incrédula romper en llanto y brincar de emoción: "No puede ser real. Esto no puede ser real", decía.

"Te aman mucho y sabemos que el año pasado fue muy difícil para ti. Haz hecho tanto por la gente de este edificio y hoy ellos quieren hacer algo por ti... Tengo un contrato de arriendo por dos años. Tus fans del edificio ya pagaron", fueron las palabras que provocaron las lágrimas de la empleada.