Aunque la mayoría de las veces no nos damos cuenta, la contaminación de los mares y los cientos de toneladas de plástico que se han convertido en parte de él, cobran vidas frecuentemente pues los animales los comen al confundirlos con alimento, o simplemente los tragan mientras nadan, lo que a la larga puede causarles la muerte. Las tortugas no están exentas de esto.

Y es que los animales no comen una o dos piezas de plástico sino decenas e incluso cientos, que al no poder ser digeridas, se acumulan dentro de sus estómagos hasta matarlos de hambre o por una obstrucción. Ejemplos para esto hay muchos, pero recientemente se dio a conocer uno que conmovió al mundo.

Un grupo dedicado cuidar y auxiliar tortugas en Florida llamado Gumbo Limbo Nature Center in Boca Raton reportó a través de sus redes sociales el hallazgo de 104 piezas de plástico dentro de los intestinos de una tortuga tan pequeña que “podría caber en la palma de tu mano”.

Cada año, las playas de Ciudad de Boca Ratón se llenan de vida cuando las tortugas marinas se acercan para desovar dejando más de 800 nidos vulnerables ante la caza y la contaminación. Durante este proceso, Gumbo Limbo monitorea a las visitantes y ayuda a las que lo necesiten, entre ellas algunas que llegan enfermas o con lesiones.

Este año, entre las auxiliadas estaba la pequeña que llevaba tanto plástico dentro del cuerpo que, pese a los esfuerzos de los especialistas, no logró sobrevivir para luego ser rehabilitada y liberada en el mar.

Sobre esta alarmante situación, la organización advierte que no todas las tortugas que reciben ayuda de un veterinarios y que el 100 % de las que han muerto, tenían restos de plástico en sus intestinos, lo que indica que, probablemente, las que sobreviven también los tengan, aunque sus entrañas no son examinadas.