Con total valentía, tres niños hicieron hasta lo imposible por liberar a su perro de las garras de una enorme serpiente.

El reptil se envolvió alrededor del cuerpo del can, dejándolo inmovilizado, pero los menores de edad le lanzaron piedras, palos, e incluso la cargaron con tal de rescatar a su mascota, que ladraba desesperado.

En medio de la desesperación, uno de ellos tomó a la víbora con sus propias manos y le sujetó la cabeza hasta que el can pudo escapar.