Un fabricante de osos de gomita rompió la ilusión de centenares de consumidores que encontraron al interior de sus paquetes de dulces penes de sabor limón, naranja y piña.

La infancia de los infantes de Nueva Zelanda nunca será la misma aun cuando la empresa ofreció una disculpa y pidió el reembolso de las fálicas figuritas a cambio de enviar ositos.

Al parecer ocurrió una confusión al momento de elaborar el producto pues no se cambió el molde utilizado para otro cliente.

?Cuando nos llegó la primera queja pensamos que era broma, no podía ser así. Pero lamentablemente no era broma y lo corroboramos cuando recibimos la primera bolsa. Días después otros consumidores llamaron ¿qué es lo que pasó??, dijo Jack Van de Geest, director de venta de la compañía.

?Estas cosas pasan?, aseguró el directivo.

Con información de Food Beast