Tras sufrir la muerte de su madre, tres hermanos en Northallerton, Reino Unido, decidieron limpiar su casa sin saber que en ella encontrarían lo que revelaría el más grande secreto de la familia: el cuerpo momificado de un bebé.

El cadaver fue hallado debajo de las escaleras de la casa y estaba guardado en una caja junto a una serie de cartas escritas en 1968. Ante la sorpresa, los Thompson llamaron a la policía para que investigara y les dijera algo sobre lo que estaba pasando. 

Las indagaciones revelaron que el ADN del cuerpo coincidía con el de Carol y Melvin Thompson, padres de los tres hermanos. También se encontró que la tela con la que estaba envuelto el cuerpo del bebé fue confeccionada a finales de la década de los 50 o inicio de los 60, pero no pudieron determinar con exactitud la fecha del muerte ni tampoco si nació sin vida o murió al poco tiempo de haber nacido. 

La pareja Thompson se divorció en 1996 y Melvin, al ser interrogado por las autoridades dijo que nunca supo siquiera que su ex esposa hubiera pasado por ese embarazo y que sus tres hijos nacieron en fechas posteriores a 1968. 

Con información de RT en Español.