Demi Burton, de 20 años, seguramente nunca imaginó que pasarse de copas en un avión le saldría tan caro. En mayo pasado, viajaba de Abu Dhabi a Manchester (al menos 4 horas de trayecto) cuando tomó mas vino tinto del que podía soportar, y ahora está arrestada por el alboroto que causó a bordo.

El alcohol hizo que a Demi le pareciera buena idea invitar a los hombres que viajaban ahí a unirse a su “club de altura” para tener sexo con ella durante el viaje en avión a 4 mil 500 millas del suelo. Pero ahí no terminaron las cosas; cuando la tripulación se negó a seguirle sirviendo vino, ella no lo tomo nada bien.

“Entonces, aterricen el avión”, habría exigido fúrica Burton cuando supo que no seguirían dándole alcohol por su visible estado de ebriedad. La escena continuó frente a los otros 259 pasajeros, como si de un espectáculo de medio tiempo se tratara, sólo que este era un poco menos decoroso.

La mujer comenzó a levantar los puños al aire mientras gritaba por toda la cabina así que la tripulación tuvo que buscar la forma de tranquilizarla con el fin de proteger la seguridad de todas las personas alrededor. Sin embargo, la tarea no fue sencilla; tuvieron que intervenir 6 personas entre asistentes de vuelo y pasajeros.

No conforme con la escena, las insinuaciones sexuales públicas y desorden causado, Demi golpeó a varios integrantes de la tripulación y mordió a uno de los pasajeros que ayudó a controlarla.

Por las agresiones, fue juzgada en Minshull Street Crown Court, Manchester, donde deberá pasar 6 meses en prisión luego de que la autoridad considerara que puso en peligro al avión y sus pasajeros. 

Con información de Metro UK.