Estudiar medicina o enfermería siempre será pesado, ya sea que tengas que trasladarte largas distancias para acudir a los hospitales, o tener que aguantar las jornadas atendiendo pacientes y situaciones trágicas.
Si los abogados y los taqueros se equivocan con tanta gente, los médicos también. Como todos. Errar es parte de la vida. Por eso no se sientan mal si terminan identificándose con estos casos aún cuando se trate de algo muy malo como ponerle una solución glucosa a un paciente diabético o colocar un DIU fuera de la cavidad uterina.
Las siguientes historias los harán morir de la risa, temer hasta de una gripe o llorar por las víctimas que tuvieron la mala suerte de cruzarse con ellos.