Lamentamos iniciar este año con una noticia triste, tanto para la ciencia, como para aquellas personas que buscan preservar el medio ambiente; George, un caracol de la especie Achatinella Apexfulva, falleció el pasado día de Año Nuevo, siendo el último de ellos; por lo que están oficialmente extintos.

El caracol vivió en completa soledad durante 14 años en las islas de Hawaii. Si bien se buscó que se reprodujera, al lado de otros diez especímenes localizados a finales de los 90; las crías nunca se pudieron lograr del todo, muriendo al poco tiempo de nacidas.

Conforme pasó el tiempo, los compañeros de George fueron muriendo uno a uno, hasta que en el 2011 él era el último de su especie. Si bien no se hablan de las razones por las que se dio la extinción de los Achatinella Apexfulva, parece ser que el humano tuvo mucho que ver, pues las conchas de estos caracoles eran muy preciadas por los lugareños, fabricando collares con ellas para su uso personal o venta a los turistas.

Lo último que queda del buen George es un pedazo de piel congelada en el zoológico de San Diego, en espera a que se desarrollen las técnicas adecuadas de clonación.

Con información de Hawaii DLNR (Department of Land and Natural Resources).