La Ciudad de México enfrenta una de sus peores crisis: la del mega recorte de agua que está afectando a más de 4 millones de habitantes que estarán en su jugo durante tres días más. 

Pero no se preocupen que no hay mal que por bien no venga y, con motivo del Día de Muertos, un vecinos de la capital que se negó a gastar en dulces, se preparó y apartó algunos botes con agua para de esta forma hacer felices a chicos y grandes.

El señor obsequia un poco de agua cada vez que alguien toca a su puerta para pedir calaverita y así, empoderado, brinda un poco de fe a los afectados del mantenimiento en el Sistema Cutzamala, cuyo servicio podría restablecerse  hasta el domingo 4 de noviembre.