Queda claro que los hombres aún desconocen gran parte del mundo femenino.

La prueba es esta pobre chica, que encontró su sujetador de silicona en el refrigerador porque su papá pensó que se trataba de una pechuga de pollo. 

Y aunque sí parece una proteína, la realidad es que se trata de un sujetador cuyo destino trágico desató una ola de mofas en Twitter.