Un abrazo de 3 mil años fue el resultado que produjo la decisión de una joven ucraniana que no aceptó vivir sin su amado y se hizo enterrar viva junto con el cuerpo de su novio.

Arqueólogos del Servicio Arqueológico de Rescate del Instituto de Arqueología de Ucrania afirman que no existe posibilidad de que la mujer haya estado muerta cuando ingresó a la tumba, pues hubiera sido imposible colocar sus restos en esa posición.

"Es un entierro único, un hombre y una mujer acostados allí, abrazándose con fuerza. Ambas caras se miraban, sus frentes se tocaban", comentó Mykola Bandrivsky, creadora del estudio Entierros amorosos en pareja. 

Ella, recostada sobre él, con su brazo derecho abrazándolo tiernamente y la muñeca sobre su hombro, pudo haber tomado veneno antes de ser sepultada, según informa Daily Mail. "Los dos vestidos con decoraciones de bronce, y cerca de las cabezas se colocaron algunos objetos de cerámica: un cuenco, un tarro y tres vasijas". 

El ritual permitió que la pareja se mantuviera unida desde  la Edad del Bronce hasta nuestros días. Según los expertos, provenían de la prehistórica Vysotskaya, una cultura asentada cerca de la aldea de Petrykiv. 

Esta antigua cultura era conocida por la ternura con que realizaban sus entierros debido a la creencia de la vida eterna en compañía del alma humana.