La euforia por el futbol llevó a un grupo de reos de la Comisaría Tercera de la ciudad de Puerto Madryn, en Argentina, a presentar un recurso extraordinario donde advierten que de no arreglarse el sistema de televisión por cable durante el Mundial, no comerán.

"Venimos a solicitarle que arreglen el cable de audiovisión ya que hace como tres días que no anda y es un derecho indispensable para toda persona privada de la libertad", dice el texto presentado por los reclusos. 

Pero además de disfrutar de la Copa, los solicitantes consideran que la ausencia de este provocaría un agravamiento en las condiciones de detención, pues según su constitución, el sistema carcelario debe ser limpio y sano, no una forma de castigo.

"Hemos tomado la decisión de no recibir la ración correspondiente del mediodía y noche hasta que se solucione este inconveniente", se lee en el texto que fue negado por la jueza penal Patricia Susana Asaro sin mayor aclaración.