Esta semana conseguí el libro de nuestro colega Mauro Jarquín, La Pedagogía del capital”, de reciente publicación, (Foca, 2021), que tiene el siguiente subtítulo: “Empresarios, nueva derecha y reforma educativa en México” (335 páginas). (1)

Al revisarlo, de inmediato me recordó a otro gran libro que aborda un campo de estudio y a actores sociales semejantes, con un enfoque desde la Sociología y la Politología críticas. Me refiero al texto de Michael W. Apple: Educar “como Dios manda”: Mercados, niveles, religión y desigualdad, (Paidós, 2002). (2)

En la contraportada del libro de Jarquín se puede leer lo siguiente: “Alrededor del Sistema Educativo Nacional desfilan organismos e instituciones cuya presencia es tan sólo la “amigable interfaz” de intereses y relaciones. Éste es un intento por categorizarlas; identificarlas no por el discurso, sino por su injerencia en la selección de contenidos, en el diseño de programas de estudio y en la prestación de servicios.”

La aportación de Jarquín pone sobre la mesa y con lupa en mano, a los grupos de interés y a las fuerzas o poderes fácticos, conservadores y con posiciones (abierta o veladamente) neoliberales, que juegan activamente en el terreno de la política y la educación, así como en la construcción y reconstrucción ideológica de la vida cotidiana, si parafraseamos a la filósofa húngara Ágnes Heller.

“Además de clasificar a los actores, el autor examina su participación en el proceso que condujo hacia una reforma educativa inspirada en el mundo del mercado, con aprendizajes limitados a ofrecer un perfil a las empresas (aunque se presente como una cruzada por la calidad educativa). Organizaciones financieras internacionales y de la sociedad civil, asociaciones de padres de familia, sectores académicos liberales, think tanks y partidos políticos quedan expuestos en su interés por garantizar la continuidad de un proyecto que pone a debate una pregunta: ¿qué significa educación y quienes deciden qué se aprende?” (Contraportada)

En el libro referido de M. W. Apple, también “…se reflexiona sobre la manera paulatina en que han sido introducidos en la sociedad elementos que hemos llegado a considerar como naturales, tales como el mercado, la competencia, la libertad, el retorno a la familia y la moralidad (entre otros) y que corresponden a la ideología de la derecha.”, según la reseña de Alaniz (ver nota).

En la contraportada de la “Pedagogía del capital” se coloca un ejemplo de la presencia de organizaciones de filiación empresarial, que no sólo son actores dirigentes del sistema económico, sino que participan, influyen, en el diseño y realización de la política educativa mexicana: “Para muestra, un botón: la organización UNETE, cuyo presidente honorario ha sido Claudio X González Guajardo (uno de los impulsores de la orden neoliberal en México), se cuenta entre las encargadas de capacitar a más de un millón de docentes en el uso de Facebook como herramienta de aprendizaje. ¿Cómo entender que la asociación presidida durante años por un férreo opositor al lopezobradorismo sea la encargada de una tarea fundamental en el presente de México?”

La estructura del libro de Jarquín comprende los siguientes apartados: Presentación, prefacio e introducción, así como dos partes. La primera dedicada a describir y discutir la mundialización capitalista y su correlato educativo. Esta parte está compuesta de un capítulo: “La educación mundializada. El Movimiento de Reforma Educativa Global (MREG).

La segunda parte lleva el mismo título del libro: “La Pedagogía del capital”, que se compone de tres capítulos: México: Empresarios y política; Ciudadanía corporativa y nueva derecha en educación (capítulo al cual dedica la tercera parte del libro, es decir, más de 100 páginas); y La sombra empresarial en el proyecto político del lopezobradorismo.

Al final, el autor incluyó un epílogo, agradecimientos y un apéndice sobre La pandemia, el mercado y el regreso de la nueva derecha.

Como presentación del libro de Jarquín, se publica un interesante texto de Luis Hernández Navarro, coordinador de la sección de opinión del diario La Jornada, quien sostiene que “…La Pedagogía del capital se zambulle de lleno en las aguas profundas de la nueva disputa por la educación pública. Con la misma precisión de los viejos muralistas, pinta un enorme muro con las fuerzas que lo acechan hoy, tal y como en el México de ayer lo hizo la iglesia católica. Lejos de clichés y lugares comunes, el libro documenta y analiza con rigor e imaginación un momento clave en la enseñanza de nuestro país”.

Quizá por ello el sugerente título de la presentación escrita por Hernández Navarro, “Educación: entre Dios y el Diablo”.

Aunque el libro inició como un proyecto de investigación acerca de la organización de filiación empresarial “Mexicanos Primero” y su papel en los procesos de confección, desde las élites dirigentes, de las Reformas Educativas en México, Jarquín señala que “…a medida que me adentré en sus particularidades programáticas, orgánicas, colaborativas y financieras, comprendí que tal asociación y sus efectos en el Sistema Educativo Mexicano (SEM) no podían explicarse sin la necesaria atención a los principios educativos que les daban norte.” (Prefacio)

¿Cuál es la intencionalidad de la nueva derecha en la educación pública de México y del mundo?

Según Jarquín, la Pedagogía del capital es un proyecto político-pedagógico de subsunción real del proceso educativo a la lógica del mercado capitalista, a sus rutas de valorización, a diversos patrones de control político sobre el trabajo docente y a la imposición de determinado “sentido común” en el campo educativo con respecto de la historia del mundo y las condiciones materiales de la sociedad…” (Prefacio)

Quizá éstas sean algunas razones para dedicar un tiempo valioso a la lectura y a la reflexión, en torno a las ideas que nos sugiere este gran libro, en medio de un clásico mezcal oaxaqueño.

Notas:

(1) Mauro Jarquín es politólogo por la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), donde actualmente estudia la maestría en Estudios Políticos y Sociales. Sus líneas de investigación comprenden política educativa, historia empresarial y teoría política contemporánea. Es profesor de la Facultad de Filosofía y Letras de la misma Universidad, donde ha impartido la materia Organismos y Sistemas Internacionales de Educación. Es colaborador del diario La Jornada.

(2) Al respecto, recomiendo la lectura de la reseña que hizo Claudia Alaniz Hernández, sobre el libro de M. W. Apple, “Educar como Dios manda”, publicado en la Revista Mexicana de Ciencias Políticas y Sociales (2004), vol. XLVII, núm. 191, mayo-agosto, pp. 200-205. Universidad Nacional Autónoma de México.

jcmqro3@yahoo.com

@jcma23