Mike Ryan, funcionario responsable de las situaciones de urgencia de la Organización Mundial de la Salud (OMS) aseguró ayer, en una conferencia de prensa desde Ginebra, que la variante Delta “es un aviso, ante el cual el mundo debe reaccionar para evitar una mayor propagación, y a la vez, el surgimiento de nuevas variantes”

Enseguida, el funcionario aseveró que en cinco de las seis regiones del mundo, según la administración de la OMS, los contagios por covid-19 han aumentado, a lo largo de las últimas cuatro semanas, en un 80%.

En otra desalentadoras declaraciones, la CDC del gobierno estadounidense, en un reporte interno, llamó a Delta tan contagiosa como la varicela, lo que ha representado un duro golpe para los ánimos de la guerra contra la pandemia. Aquel discurso del presidente Joe Biden, por el cual enfatizaba una y otra vez de que un ciudadano que había recibido el esquema vacunación completo podía prescindir de las mascarillas, parece ser un tema del pasado.

Sin embargo, las opiniones de funcionarios en Ginebra o Washington no resolverán el problena, ni tampoco semáforos epidemiológicos que nadie comprende y que no tienen efecto alguno en la actitud de los ciudadanos.

En México, mientras los contagios avanzan, la vacunación se retrasa, jóvenes se infectan, y muchos de ellos, (la mayoría con comorbilidades o afectaciones crónicas) terminan en una cama de hospital, o en su caso, en lamentables fallecimientos; al tiempo que los centros de salud se saturan.

Resulta importante señalar, empero, que la correlación entre el número de nuevos contagios y las hospitalizaciones no puede ser la misma de inicios de año, pues los grupos vulnerables, a saber, adultos mayores, cuentan con un esquema completo de vacunación. Desafortunadamente, por el incremento en términos absolutos de los contagios, sí que se puede ver una saturación hospitalaria en las principales ciudades del país.

El mundo sufre nuevamente. Luego de algunos meses de relativa calma, nos enteramos de casos de personas infectadas.

La variante Delta circula y la guerra contra el covid-19 continúa. En un sencillo ejercicio de comparación histórica con la guerra mundial de 1939-1945, nos encontramos en el momento en que la Alemania nazi (el covid) intensifica sus atroces actos contra los judíos y las poblaciones civiles en los territorios ocupados, luego del desembarco de Normandía (las vacunas) en junio de 1945.

El covid y sus malditas variantes verán sus últimos días. Sin embargo, mientras eso ocurre, habrá sufrimiento para muchos.