Manama, 24 feb (EFE).- Más de 20.000 personas participaron hoy en una multitudinaria manifestación en Manama convocada por la oposición bareiní para exigir reformas democráticas y la liberación de los detenidos durante las protestas.

La marcha, denominada "Un pueblo que no conoce la humillación", contó con la participación de los principales grupos opositores y transcurrió sin incidentes, pese a la tensión vivida las últimas semanas en torno al primer aniversario de la revuelta.

En el comunicado final de la manifestación, la oposición insistió en que no va a desistir en sus demandas de reformas democráticas, que motivaron un levantamiento popular, que estalló el 14 de febrero de 2011.

Esas demandas son la formación de un gobierno que exprese la voluntad popular en vez de un ejecutivo designado, un sistema electoral justo, y un poder judicial con prerrogativas y supervisión financiera y política.

Además, los opositores consideraron que un diálogo entre la oposición y las autoridades será "inútil y absolutamente inaceptable si no se responde a todas las legítimas demandas por las que se lucha".

La conmemoración del primer aniversario de la revuelta, el pasado día 14, estuvo marcada por multitudinarias marchas, así como por detenciones y disturbios en los alrededores de la emblemática plaza Lulu de Manana, la capital de Baréin, tomada por las fuerzas de seguridad.

El reino de Baréin, con una mayoría chií del 70 por ciento ha sido escenario en el último año de revueltas populares contra la minoría suní que gobierna el país, encabezada por el rey Hamad bin Isa al Jalifa.

Durante las protestas, decenas de personas fueron detenidas y algunos opositores chiíes y defensores de derechos humanos fueron condenados a cadena perpetua acusados de intentar derribar al régimen.