Washington, 27 feb (EFE).- La Casa Blanca afirmó hoy que la violencia contra militares estadounidenses tras la quema de ejemplares del Corán en una base de la OTAN en Afganistán no acelerará la vuelta de las tropas del país, prevista para 2014.

El portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, aseguró que Estados Unidos mantendrá su política en el país "diseñada para estabilizar el Gobierno afgano para que pueda hacerse cargo de la seguridad y que permita a las tropas estadounidenses retirarse".

Carney señaló que la estrategia ya está en marcha y la violencia no va a acelerar el cronograma para la retirada de las tropas. "No, no creo que lo haga", dijo, "el proceso ha comenzado. Se completará no antes de finales de 2014 como estableció la OTAN en Lisboa", señaló.

Desde que la semana pasada salió a la luz que en la base de la OTAN de Bagram, en Afganistán, fueron quemados ejemplares del Corán por soldados estadounidenses, algo que el Pentágono ha achacado a un error por encontrarse entre otro material de desecho, han muerto 30 personas en manifestaciones violentas.

El sábado dos soldados estadounidenses fueron hallados muertos con disparos en la cabeza en las dependencias del ministerio del Interior afgano, en un ataque reivindicado por los talibanes como una venganza por la quema de coranes.

Carney, que calificó los hechos de "trágicos y horrorosos", aseguró que Estados Unidos seguirá trabajando con el Gobierno afgano "en el esfuerzo para calmar la situación" y continuar con la puesta en marcha de su política para derrotar a Al Qaeda "que es por lo que estamos en Afganistán". EFE

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