Santiago de Chile, 24 feb (EFE).- El presidente Sebastián Piñera, que este viernes puso fin a una gira de cuatro días por las zonas más afectadas por el terremoto y tsunami de 2010, se defendió de las críticas de la oposición y señaló que el Ejecutivo ha hecho un esfuerzo "gigantesco" en reconstrucción.

Piñera recordó que los daños de la catástrofe alcanzaron los 30.000 millones de dólares, que equivalen al 17 por ciento del producto interno bruto, y subrayó que ello supera lo ocurrido en países como Japón y Estados Unidos.

El mandatario chileno, en un discurso ofrecido en la ciudad de Concepción, una de las ciudades más afectadas por el terremoto, afirmó que sería bueno "que algunos (la oposición) abrieran los ojos y vieran lo que pasa en otras partes del mundo"

Destacó que en menos de dos años "hemos logrado reconstruir dos tercios de lo que el terremoto y el maremoto destruyeron en pocos minutos esa madrugada del 27 de febrero".

A pesar de esto, "no es el momento de dormirnos en los laureles ni bajar la guardia, estamos muy conscientes que aún nos resta un largo camino por recorrer, porque aún nos queda un tercio de labor de reconstrucción".

El terremoto del 27 de febrero de 2010, de 8,8 grados en la escala abierta de Richter, que se sintió a las 03.34 hora local (06.34 GMT), estremeció a Chile durante casi tres minutos.

El sismo, que liberó una energía equivalente a 100.000 bombas atómicas como la que se lanzo sobre Hiroshima y considerado el quinto más grande de la historia, dejó 524 muertos, 25 desaparecidos, 800.000 damnificados y 30.000 millones de dólares en pérdidas.

El presidente Piñera destacó que están en plena construcción 136.000 de las 220.000 viviendas destruidas, de las que ya se han entregado 72.000.

Al hacer un desglose por sectores, el mandatario chileno, sostuvo que la infraestructura de salud se ha reconstruido en un 96 %, en educación un 73 %, en puentes, puertos y otras obras viales, un 99,8 % y en edificios un 58 %, incluido el Palacio de La Moneda, sede del Ejecutivo.

El presidente finalizó su discurso al destacar que "hoy día, en la mitad de nuestro periodo de Gobierno y a dos años del terremoto y el maremoto, quisiera ratificar el compromiso que asumimos desde el primer día, que es completar el ciento por ciento de la obra de reconstrucción de lo que fue destruido o dañado por el terremoto antes que termine nuestro mandato".

Sin embargo, el balance que hizo hoy el gobernante chileno contrasta con fuerza con la realidad de miles de damnificados que se preparan para volver a pasar un nuevo invierno en cabañas de madera sin sus servicios elementales.

Constitución, Dichato, Talca, Pelluhue, Chanco y decenas de otras localidades muestran, dos años después del terremoto, la falta de ayuda oficial y donde simplemente no ha habido ningún gestión respecto de la tan prometida reconstrucción, señalaron los vecinos.