La renuncia de Eduardo Medina Mora al cargo de ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) fue abrupta y generó demasiadas interrogantes. Las dudas del porqué de su acción se fincan desde sus riquezas de dudosa procedencia hasta la posible presión por parte del gobierno federal.

Para saber más sobre la percepción pública en la materia, las empresas SRS y OPMI, a través de AMLOVEmetrics, formularon la siguiente pregunta a una muestra estadísticamente representativa de los mexicanos:

“El ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Eduardo Medina Mora, renunció a su cargo luego de que la Unidad de Investigación Financiera de la Secretaría de Hacienda presentó una denuncia en su contra por lavado de dinero. Hay quienes dicen que recibió presiones para que renunciara. ¿Cree usted que su renuncia se debió a las investigaciones por presunta corrupción relacionadas con lavado de dinero o a que recibió presiones para que dejara el cargo?”

AMLOVEmetrics

El 68% de los entrevistados consideraron que la renuncia se debe a las investigaciones por presunta corrupción, relacionadas con lavado de dinero, mientras el 32% restante consideró que renunció dadas las presiones que recibió para que dejara el cargo.

AMLOVEmetrics

Cabe recordar que desde tiempo atrás, cuando Medina Mora fue propuesto para ingresar a la Suprema Corte, recibió un rechazo generalizado de muchas organizaciones de la sociedad civil y actores sociales y políticos de diversa orientación, aduciendo que el constitucionalista no poseía los atributos necesarios para ocupar dicha posición y porque arrastraba cuestionamientos a su desempeño en responsabilidades previas, así como por haberse negado a hacer públicas sus declaraciones patrimoniales.

Así, prácticamente un 70% de los encuestados (independientemente de lo que opinen sobre la inocencia o culpabilidad del ministro) consideran que su renuncia sí tiene que ver con las investigaciones iniciadas y no a motivos personales o de presión política. Consideran que las imputaciones en materia de corrupción (operaciones bancarias sospechosas detectadas en Gran Bretaña y los Estados Unidos) fueron suficiente motivación para que Medina Mora dejara el cargo.

Por su parte, el 32% de los entrevistados vislumbra que recibió presiones para que dejara el cargo. Es posible que, para este porcentaje de la población, la UIF (a cargo de Santiago Nieto, dependiente de la secretaría de Hacienda) deba ser más discreta y mostrarse en todo momento imparcial al realizar sus investigaciones de forma que la ciudadanía no suponga que existen presiones innecesarias de parte de dicha dependencia contra los funcionarios y exfuncionarios.

En esta ocasión, se levantaron 800 encuestas vía telefónica desde un Call Center, el 13 de octubre, con selección aleatoria de entrevistados y un margen de error estadístico de +-3,4%. No incluye el 16.9% de quienes dijeron “no sabe”.

AMLOVEmetrics continuará inquiriendo, como lo viene haciendo desde el día posterior a las elecciones presidenciales de 2018, sobre diversas cuestiones del acontecer nacional que sean de interés para la ciudadanía mexicana.