México.- Seis exempleados de Heckler & Koch comparecieron este martes ante un tribunal en Stuttgart, Alemania, por la venta ilegal de miles de armas en México.

Activistas de derechos humanos se manifestaron al inicio del juicio frente al tribunal denunciando que las armas en cuestión podrían haber sido empleadas en la desaparición de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa ocurrida en septiembre de 2014.

Los acusados son sospechosos de la venta de fusiles de asalto automáticos G36 entre 2006 y 2009 infringiendo con ello la legislación alemana sobre la venta de armas.

Se trata de dos ex directores generales, dos ex directores comerciales, una empleada comercial y un ex representante de la firma en México cuyas edad van de los 54 a los 77 años; de ser encontrados culpables alcanzarían penas de hasta cinco años de prisión y multas para la fabricante de armamento.

La acusación destaca que los acusados conocían que el armamento terminaría en estados proclives a la violencia, algo que la licencia de exportación prohibía de manera formal.

La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) aprobó la compra de 9 mil 652 fusiles, 4 mil 796 de ellos terminaron en estados como Guerrero y de acuerdo con activistas de derechos humanos, los fusiles G36 fueron enviados a la policía de Iguala, epicentro de la desaparición de los estudiantes.

"Los que autorizaron esas exportaciones de armas (...) son cómplices de asesinato", declaró el activista Jürgen Grässlin, a un canal de televisión regional.

Grässlin, quien es presidente de la organización Oficina para la Información sobre Armamento,  fue quien presentó una demanda en 2010 e inició el caso tras ser contactado por un exempleado de la fabricante que estaba inconforme con dichas ventas.

El juicio que inició este martes en la Audiencia Provincial de Stuttgart tiene previstas sesiones hasta el 25 de octubre.

Con información de AFP y Deutsche Welle