México.- Una niña de un año de edad es la más delicada de los cinco menores que se encuentran hospitalizados tras la explosión ocurrida la noche del lunes en San Isidro Chilchotla, Puebla.

De acuerdo con el secretario de Gobierno de estado, Diódoro Carrasco Altamirano, el gobernador Antonio Gali visitó a los lesionados e informó que la mayoría de los adultos han sido dados de alta a excepción de dos que están en Traumatología.

"Lo que tenemos básicamente son cinco niños y niñas desde un año de edad hasta 15, algunos con problemas de que le están operando un ojo, otro tiene problemas, un golpe muy fuerte en la cabeza”, comentó.

“Tenemos una pequeñita de un año que es la que tiene mayor riesgo, todos los demás, nos acaba de informar el médico, que prácticamente están evolucionando, están en observación y la más delicada es la más pequeña", dijo.

En entrevista con Radio Fórmula, sostuvo que 11 menores de edad perdieron la vida porque estaban en la fiesta del pueblo, en la que participa toda la sociedad.

Y aunque la mayoría de los testimonios coinciden en que se trató de típicamente un accidente, un descuido, una chispa, la que generó esta tragedia, la Procuraduría del Estado ya realiza las investigaciones correspondientes.

Carrasco Altamirano recordó que a las afueras de la casa del mayordomo, que tenía almacenadas unas gruesas de cohetes para la fiesta, la gente celebraba con pirotecnia y uno de los cohetes en lugar de irse para arriba entró al cuarto donde estaba la pirotecnia y la explosión hizo que la loza del techo se desplomara y ahí murieron nueve personas, en tanto que cinco más en un hospital.