San Pedro Garza García.- Considerado por sus habitantes como “La Joya de la Corona” y uno de los más ricos del país, el municipio de San Pedro Garza García, Nuevo León se ha convertido prácticamente en un “pueblo fantasma” ante la cuarentena que impera en todo el Estado por el coronavirus Covid-19.

Avenidas y calles desiertas desde ayer, lujosos restaurantes y centros comerciales desolados es el panorama actual de esta ciudad del área metropolitana de Monterrey, en la Entidad, que han dado positivo de padecer esta nueva enfermedad.

Las autoridades federales han llamado a realizar La Jornada Nacional de Sana Distancia del 23 de marzo al 19 de abril, como medida de precaución ante la llamada epidemia.

Los negocios en San Pedro lucen solos ante la alerta por el coronavirus.

San Pedro es uno de los puntos en donde se concentra gran parte de la actividad económica de Nuevo León, y por consecuencia suele haber gran tráfico de vehículos y personas; pero tras la alerta emitida por las autoridades tanto municipales como estatales todo esto se ha detenido.

El ingreso per capita de los sampetrinos en el 2018, se estimaba en al menos 60 mil dólares anuales, según la calificadora Fitch Ratings.

Esta ciudad cuenta con una población aproximada a los 120 mil habitantes, más otras decenas de miles de personas como poblacion flotante que acuden a laborar o de paseo.

Por avenidas emblemáticas como Vasconcelos, Lázaro Cárdenas, Alfonso Reyes, Calzada del Valle, Calzada San Pedro, Eugenio Garza Lagüera, entre otras, circulan habitualmente más de 200 mil vehículos pero esta semana no llegarian ni a un 10 por ciento de esta cantidad.

Lo que en un día normal es una atestada avenida, hoy la soledad.

Por lo que es más que evidente que la población del mismo municipio y de otras partes del area metropolitana, han estigamtizado a San Pedro desde el pasado 11 de marzo; cuando se dio a conocer que un reconocido empresario sampetrino de 57 años, fue el priimer caso en la Entidad de haber contraido el coronavirus Covid-19 tras un viaje de negocios por Alemania, Inglaterra y España.

El estacionamiento de un centro comercial sampetrino.

El alcalde de este lugar, Miguel Treviño, fue el primer presidente municipal en ordenar cierre de lugares públicos como gimnasios y centros de diversión, lo que causo gran descontento entre la población en general.

Hoy todo Nuevo León adoptó estas medidas y que fueron ordenadas por el Gobierno estatal.

Es notorio que el municipio más próspero y rico de Nuevo León luzca ahora desolado y estigmatizado por los 12 casos positivos de Covid-19 entre sus ciudadanos.

La “Joya de la Corona” es, y será en los próximos días de la pandemia, escena de un desierto.