México.- La denuncia realizada por familiares de los italianos desaparecidos en Tecalitlán, Jalisco, presenta contradicciones, dijo la Fiscalía General del Estado (FGE) de Jalisco.

El fiscal Raúl Sánchez Jiménez indicó que la familia de los extranjeros les dijeron que los extraviados habían llegado a Jalisco un día antes de sus desaparición (30 de enero), sin embargo, ya tenían varios días en el estado.

Según la denuncia familiar los italianos eran turistas, pero el fiscal informó que no era cierto, pues se dedicaban al comercio de plantas de luz, soldadura y herramientas “pirata”.

En una reunión que Sánchez Jiménez tuvo con el consejero de la embajada de Italia, Simón Landini, descubrieron que el mayor de los desaparecidos, Raffaele Ruso de 60 años, fue detenido en febrero de 2015 en Campeche por fraude y cohecho tras una denuncia por empresarios por haberles vendido mercancía china.

La FGE solicitó a autoridades italianas información para saber si los italianos cuentan con antecedentes penales en su país.

Sánchez Jiménez añadió que la policía municipal ya fue desarmada y a sus 33 integrantes se les mandó a capacitarse a la academia de Jalisco, por lo que la Fiscalía será la encargada de la seguridad en Tecalitlán.

El pasado 31 de enero tres italianos desaparecieron en el municipio de Jalisco, después de que dos perdieron el rastro de un familiar y cuando otros dos fueron a buscarlo también desaparecieron; presuntamente policías los habrían detenido y no se supo qué pasó después.

Con información de Proceso y El Heraldo de México