México.- Los cinco comerciantes veracruzanos que se encontraban desaparecidos a principios de esta semana, fueron identificados entre las siete personas halladas asesinadas en el municipio de Chilapa, Guerrero.

La mañana de este viernes, sus familiares llegaron a las instalaciones del Servicio Médico Forense (Semefo) de Chilpancingo, para reclamar e identificar los cuerpos. 

Entre las víctimas se encontraba un joven de nombre Gonzalo "N", de 18 años de edad, así como Daniel "N", de 34 años, estos dos eran hermanos; también se identificó a Aurelio "N", de 37 años; Roberto "N", de 24 años; y Abel "N", de 35 años; todos originarios del poblado de Coxolitla de Arriba, municipio veracruzano de Acultzingo.

Coxolitla es un pueblo indígena de poco más de 400 habitantes; el 26.5 por ciento de la población es analfabeta; la mayoría de su población se dedica a la elaboración y venta de muebles de madera. 

De acuerdo con reportes policíacos, la mañana del pasado martes, los restos de siete personas desmembradas y decapitadas, fueron hallados dentro de más de 10 bolsas negras de plástico en la colonia Magisterial de la ciudad de Chilapa de Álvarez.

Las otras dos víctimas era un hombre y una mujer identificada como Dolores "N", de 51 años de edad, quienes eran pareja y fueron privados de su libertad por personas armadas junto a su hija de 18 años, de la cual hasta el momento se desconoce su paradero. 

Familiares de los cinco comerciantes, dijeron que desde la semana pasada salieron a bordo de una camioneta cargada de muebles para venderlos en la ciudad de Chilapa de Álvarez; tres días después, al no saber nada de ellos, decidieron buscarlos. 

A través de las redes sociales y diversos medios de comunicación de Veracruz, la mañana de este 1 de febrero se difundió la noticia y fotografías de los cinco comerciantes, afirmando que habían desaparecido en el municipio de Chilapa de Álvarez.

Después de que algunos medios de Guerrero difundieran las fotografías de las cabezas de las siete víctimas, los familiares de los comerciantes confirmaron que se trataba de ellos y pidieron ayuda a las autoridades de su municipio, quienes les brindaron el apoyo para trasladarlos a Chilpancingo y así reclamar los cuerpos legalmente. 

Agregaron que una funeraria de Chilpancingo les cobraría 39 mil pesos para trasladar los cuerpos hasta su comunidad en el estado de Veracruz, pero que primero se reunirían con el titular de la Fiscalía General del Estado (FGE), Xavier Olea Peláez para ver de qué manera los apoyarían. 

Sin embargo, autoridades de la Fiscalía informaron a los familiares que no les podrían entregar los cuerpos, debido a que fueron desmembrados y tenían que realizarles pruebas para confirmar que partes eran de las víctimas, lo que tardaría cerca de un mes para poder entregárselos, pero los familiares pidieron que se los entregaran así para darles cristiana sepultura, pues son de escasos recursos.